Lorenzo Silva estudió Derecho y ejerció durante algunos años como abogado, pero su verdadera vocación era la literaria. En 1995 publicó su primera novela, Noviembre sin violetas, después llegarían La sustancia interior y La flaqueza del bolchevique —con la que quedó finalista del Premio Nadal—. Pero sin duda, los personajes que le han dado un lugar de honor en las letras españolas son los guardias civiles Rubén Bevilacqua y Virginia Chamorro, que este 2023 cumplen 25 años y trece novelas.
Charlamos con Lorenzo Silva sobre este aniversario, sobre las adaptaciones cinematográficas y sobre lo que han supuesto estos personajes en su trayectoria como escritor.
“Harry el Sucio pega tres plomazos con el Magnum 357 y se acaba el problema. A mí, sin embargo, me interesa más el personaje que sabe que es una pieza de un engranaje, de un engranaje que no es perfecto, de una maquinaria que falla. Y que dentro de eso logra hacer su aportación”.
Es curioso, Lorenzo Silva afirma que a través de Bevilacqua puede hablar de todo tipo de corrupciones, pero no nombra la corrupción más extendida en España, que no es la politica sino la sindical. ¿Por qué ninguna novela policiaca habla de los corruptos sindicatos españoles, que son casi tan corrupto o más que los norteamericanos, tan tratados literariamente?