El guion inédito de ¡Viva Rusia!, de Luis García Berlanga, se publica por primera vez como libro tras salir de la Caja de las Letras del Instituto Cervantes en junio de 2021, en una edición que completa la trilogía Nacional cinematográfica y aporta «la versión berlanguiana de los años del PSOE de Felipe González».
Hidalgo (Pamplona, 1953) ha explicado que este guion permite conocer el desenlace previsto para las andanzas de la familia de aristócratas que arrancaron en la película de 1978 La escopeta nacional. Ha indicado que, después del «tardofranquismo contemplado en La escopeta nacional, la llegada de la democracia y la monarquía en la película Patrimonio nacional, y contar la España, un poco, en crisis con ocasión del golpe de estado del 23F en la cinta Nacional III, este libro, que no se llevó al cine, completa la saga». Ha señalado que ¡Viva Rusia! incluye «las bromas habituales de García Berlanga y Azcona en la trilogía Nacional«, compuesta por La escopeta nacional, Patrimonio nacional y Nacional III y, en el caso del guion que ahora se edita, las relacionadas con «el periodo socialista y sus expectativas ante los acontecimientos de 1992. Como siempre, en el cine berlanguiano hay pullas para todo el mundo en una línea que, cuando releía este guion para su edición, me doy cuenta de la enorme incorrección a ojos de hoy del humor que gastábamos entonces. Es una historia con un humor totalmente incorrecto, pero al cien por ciento: no hay títere con cabeza«, ha expresado.
Hidalgo ha destacado que este guion, en principio, había sido titulado Nacional IV por García Berlanga y Azcona para ser llevado a la gran pantalla, pero «pasó por algunas incidencias, empezando por una trágica, que fue la muerte del actor Luis Escobar a principios de 1991, quien iba a ser el protagonista del guión que habían escrito». Ha relatado que «cuando murió Escobar había que introducir cambios porque era el protagonista, pero, para entonces, la relación entre Azcona y García Berlanga se había resentido. El primero no se mostró dispuesto a hacer una reforma que exigía la muerte del protagonista y la desaparición de este personaje». En aquel momento, ha proseguido, «por consenso, se introdujo en el proyecto a Jorge Berlanga, hijo de Luis García Berlanga y también escritor, y los dos Berlangas hicieron una versión muy extensa, de más de 160 páginas, pero, junto al productor, Andrés Vicente Gómez, percibían que no era buena esa extensión. Es entonces cuando, de común acuerdo, me buscaron a mí, que ya había hecho guiones para Gómez y tenía amistad con ambos, y me propusieron que hiciera una versión en la que, por lo menos, había que suprimir 50 o 60 páginas, y eso es lo que hice», ha precisado.
Ha remarcado que este proceso no solo consistió en cortar partes del guion, sino en, «aparte de meditar lo que cortas, hilvanar para que la línea de la trama no pierda sentido y, seguramente, inventar cosas nuevas, y así nació» el guion ahora publicado bajo el título de ¡Viva Rusia!, que también le puso este escritor. Este título es «una irónica alusión a la biografía de Luis García Berlanga, quien, principalmente por salvar la vida de su padre, condenado a muerte por el régimen franquista como republicano, se apuntó de voluntario en la División Azul. Entonces, era una broma interna entre los participantes en la película» que no se llegó a rodar, ha recalcado.
Berlanga dijo en los noventa que se alistó (no se apuntó, que no era un cursillo de costura) en la División Azul para salvar la imagen de la familia, ya que su padre era republicano. A mí me chirría la versión. No afirmo que sea falsa, pero no me convence, y no porque sea detractor de Berlanga, y mucho menos de la División Azul. Es que ahora va a resultar que la mayoría de los que hicieron cine durante el franquismo eran respetables republicanos, como Rafael Gil, Pepe Sacristán, Fernán-Gómez, Francisco Rabal, Paco Martínez Soria, Alfredo Mayo o José María Forqué. O el franquismo era un coladero de republicanos, o mienten, o cambiaron de chaqueta, o no era tanto como nos han contado, o un poquito de todo.