«Entre las 977 obras presentadas al Premio Iberoamericano de Poesía Juan Ramón Jiménez, el Jurado concede por unanimidad el premio al libro Soy Lola Jericó por su acusada personalidad poética al abordar con una clara contundencia verbal aspectos relacionados con la desigualdad de género, siendo capaz su autor de elevarla a poesía con una expresión conmovedora y contemporánea. Un libro rompedor que, sin eludir las zonas oscuras de su cruda realidad, contiene la verdad y la belleza merecedoras de este galardón».
Soy Lola Jericó cuenta la conmovedora historia de una mujer que el autor conoció a través de Facebook y con la que mantuvo durante algún tiempo una extraña relación mediante mensajes por Messenger. Lola se esfumó un buen día igual que había aparecido y nunca volvió a tener ninguna noticia suya. Después de varios años, Céspedes escribe este homenaje, como un diario reconstruido, a un ser que se desvaneció entre la niebla del lugar donde ella dijo que quería morir.
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Se levantó mi casa
el año que nacía Apollinaire.
Sus muros están hechos con las conchas
tristemente vacías de amonites, nautilos, caracoles…
Es por eso que el tiempo se extravía
y el espacio se curva en los pasillos.
Por eso mis silencios tienen eco.
***
Todo cristal ansía
dividir lo que existe en dos mitades.
Tú estás dormida dentro de la caja
y yo fuera mirándote igual que en nuestros juegos.
Toda la incompetencia de este mundo conspira
para que la muerte siga entretenida.
Hay veces que hasta el tiempo
se considera póstumo a sí mismo.
Solamente el futuro ha aprendido a esperar
sin tener aún remordimientos.
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Sé que llegará el día en que mis pechos
rezumen soledad.
El hijo no nacido está esperando
esta leche que mana en un desierto
que huele a bronceador.
Los turistas están tomando el sol en las tumbonas
y lo anoto.
Son la única evidencia
tendida como un puente
entre lo que conozco y lo que ignoro.
(Escribo esto).
Se proyecta en la arena
la sombra de los buitres.
Aborrezco esas vidas
que son como un vestido
que se cuelga en su percha
cuando llega la noche.
Las únicas verdades que distingo
están en los abismos del teclado.
***
Una chiquilla sueña que está recolectando
los restos de unas casas calcinadas,
así luego las madres de los desposeídos
podrán parir en ellas sus cenizas.
No sabe que construye los cimientos
de otra hoguera más grande en otro sueño.
***
La belleza tiende a la timidez generalmente,
es humilde y no grita. Otras veces estalla
en su esplendor con una luz oscura.
Así es el mundo, nos ofrece fugaces
y afónicos destellos de belleza
que hieren cuando estamos
lo suficientemente en calma para verla.
Esa luz amarilla, luz oscura,
es silencio de fondo, alumbra los disfraces
que usamos cada día para reconocernos.
Y lo que queda es polvo
de un aire deslucido.
Las que andamos en cosas como esta
(intentando echar fuera aquello que por dentro nos acosa)
siempre vamos a tientas,
buscamos acertar en lo que hacemos,
sea en mármol, papel, trozos de tiempo,
soledad carcomida…
Soy como esa paloma ahogándose en el suelo
que aspira la calima ardiente del asfalto.
Madrid hoy no perdona,
pero esconde en sus llamas la belleza y la muerte
como un gas que llenase de pronto los abismos.
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Autor: Alejandro Céspedes. Título: Soy Lola Jericó. Editorial: Dip. Prov. de Huelva, Colección Juan Ramón Jiménez. Venta: Servicio de Publicaciones Diputación de Huelva.
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Alejandro Céspedes (Gijón, diciembre de 1958), con 14 libros publicados y varias plaquettes, ha obtenido a lo largo de su dilatadísima trayectoria varios de los premios literarios más prestigiosos. Al XLII Premio Iberoamericano de Poesía Juan Ramón Jiménez se le añade el Premio de la Crítica de Asturias, que le ha sido concedido en dos ocasiones (2008 y 2021), el Premio Jaén, el Premio Blas de Otero, el Premio Hiperión, o el Premio Ángel González, entre muchos otros. Varios de sus libros han sido seleccionados entre los 5 mejores del año por El País, El Mundo, El Español y la Revista El Ciervo. Reconocido vídeo-poeta, su obra audiovisual ha sido proyectada en los más importantes festivales internacionales. Su obra literaria ha sido recogida y estudiada en numerosas antologías y ensayos literarios en España, Reino Unido, Chile y varias universidades de EE.UU. (Texas, Cleveland, New York). Desde 2008 desarrolla un importante trabajo en el ámbito de la poesía escénica y el vídeo-espectáculo, sus obras han sido representadas en muchos de los espacios escénicos más importantes de España. Ha sido crítico literario en el diario El Mundo, La Cultura de Madrid, La Cadena Ser y el Círculo de Bellas Artes de Madrid, donde dirigió el programa Definición de Savia, actualmente es colaborador de la revista digital Zenda Libros.
Otras de sus más recientes publicaciones son: Cazadores de icebergs (Salto de Página, 2022), La infección de lo humano (2021) y El Aliento del klai (2020), ambos en Huerga & Fierro–Rayo Azul. Es editor de la obra poética completa de Luis Sepúlveda que muy próximamente se publicará en Grecia, Italia, Portugal y España.
TODO SOBRE ESTE AUTOR EN: www.alejandrocespedes.com
Toda la inspiración se quedó en el primer poema. El resto es malo de cullons. Qué verguenza suelen ser los premios literarios de este país. Qué absurdeces hechas pasar por poesía. Una no sabe si reír o llorar.
esta leche que mana en un desierto
que huele a bronceador……… (no hay por donde coger semejante mezcla)
Los turistas están tomando el sol en las tumbonas
y lo anoto. (esto es poesía de la experiencia, pero de lo peor).