El 11 de noviembre de 1417 se produjo el fin del Cisma de Occidente con la elección de Otón Colonna —convertido en Martín V— como jefe de la iglesia católica. Este acuerdo para elegir un nuevo Papa terminó con la división provocada por las luchas entre varios obispos —desde 1378— para hacerse con el poder pontificio.
¿Cómo fue el Cisma de Occidente?
El monarca francés Felipe el Hermoso —famoso por haber acabado con los templarios— no tenía una buena relación con el Papa de Roma Bonifacio VIII. Sus enfrentamientos acabaron con la muerte de este último. Los cónclaves para elegir sucesor se convirtieron en una gran batalla de intereses políticos y dinásticos. Tras la muerte de Gregorio XI, en 1378, se produjo la gran ruptura. Los cardenales reunidos en Roma decidieron que el siguiente Papa debía de ser italiano, y eligieron a Urbano VI. Algunos de esos cardenales, se marcharon de Italia y se reunieron para declarar que la elección la habían realizado bajo presiones. En septiembre eligieron un nuevo Papa, Clemente VII. Ambos pontífices se excomulgaron mutuamente. Sus muertes no resolvieron el problema, y los dos bandos siguieron eligiendo su propio Papa. En 1407 parecía que se llegaría a un acuerdo con la abdicación conjunta de Gregorio XII, y Benedicto XIII. Pero todavía se tuvo que esperar otra década para que la elección de Martín V pusiese fin al conflicto dentro de la iglesia católica. Aunque Benedicto XIII, el Papa Luna, siguió reivindicando su poder desde Peñíscola hasta su muerte en 1423.
¿Quién fue el Papa Luna?
Pedro Martínez de Luna y Pérez de Gotor ha pasado a la historia como el Papa Luna. Este aragonés, perteneciente a un noble linaje, después de estudiar leyes y ser instruido en el artes militares, dio sus primeros pasos en el seno de la iglesia como cardenal de uno de los pontífices de Aviñón, Gregorio XI. En pleno cisma, a la muerte de Clemente VII, Pedro de Luna fue elegido Papa con el nombre de Benedicto XIII. Francia, que hasta ese momento había dado su apoyo a los prelados de Aviñón, le solicitó que abdicase, a lo que el Papa Luna se negó. Sin la protección francesa, y al haber perdido el favor de portugueses y navarros, Benedicto XIII tuvo que huir a Nápoles. Participó en la negociación para la abdicación, pero sus ansias de poder le impidieron llegar a un acuerdo. Luna se consideraba el único pontífice con derecho a serlo, al ser el único de los tres que había sido antes cardenal. Acabó sus días en Peñíscola, declarado hereje y antipapa, sin renunciar a sus privilegios, y con la única protección del rey de Aragón.
Otras efemérides históricas del 11 de noviembre
El 11 de noviembre de 844 el emirato de Córdoba derrotó a las tropas vikingas en la batalla de Tablada.
El 11 de noviembre de 1500 Fernando el Católico y Luis XII acordaron la partición del reino de Nápoles.
El 11 de noviembre de 1821 nació el escritor Fiódor Dostoievski en la ciudad de Moscú.
El 11 de noviembre de 1918 Alemania firmó su rendición en la I Guerra Mundial. Las negociaciones habían comenzado en los días anteriores. En junio de 1918 los ganadores decidieron los castigos para el país germano.
Con todos mis respeto, ud no tiene idera de lo que pasó y de porque unos actuaron de una manera y otros de otra Ha metido ud la pata en varuios hechos historico