Históricamente hablando, esta es una de las canciones más importantes de la música moderna: fue el primer tema rock and roll que llegó al número uno de las listas pop estadounidenses (Big Joe Turner ya había sido número uno en la de rhythm and blues poco antes con «Shake, Rattle and Roll»), y de ahí pasó a las británicas y a todo el mundo. El intérprete más conocido de esta canción, Bill Haley, está acreditado como uno de los pioneros en actuar tocando en directo este tipo de música en Europa, y Dave Gilmour, de Pink Floyd, diría años más tarde que probablemente decidió ser guitarrista por influencia de este músico y de esta canción.
Como era habitual en los años 50, a menudo las canciones se escribían sin ningún artista específico en mente que las fuera a interpretar, o si había uno, no era seguro que luego fuera el primero ni el único ni el más conocido en hacerlo. En este caso, fue escrita a finales de 1952 y grabada por primera vez por la banda italoamericana Sonny Dae & His Knights, pero fueron Bill Haley And His Comets quienes interpretaron la versión definitiva en abril de 1954, y aun así su estreno tuvo lugar solo como cara B de otro tema, «Thirteen Women». Durante unos meses no pasó de ser un single más entre los muchos que mostraban la creciente pujanza del rock influido por los blues que venía a sustituir en el gusto popular a las big bands de los 40, pero tuvo que esperar a aparecer en la película Semilla de maldad (Blackboard Jungle), protagonizada por Glenn Ford, para convertirse en el gran éxito que representaba a toda una era. De hecho, eso era lo que querían hacer los productores del film, elegir algo que reflejara lo que la gente joven del momento escuchaba a mediados de los 50, y de entre la colección personal de discos de Peter Ford (el hijo de Glenn) se escogió este tema (y esta versión) en concreto. Desde entonces, su lugar en la Historia ha sido refrendado con varios nombramientos, votaciones, reconocimientos, apariciones en listas y recopilatorios, etc. Haley regrabó la canción varias veces y la llegó a interpretar ante la reina Isabel II de Inglaterra.
Como ya vimos al hablar de Elvis, el rock and roll de los 50 hoy tiene una imagen más juguetona y viejuna, casi de banda que toca en la BBC (bodas, bautizos y comuniones), pero en aquel entonces suponía toda una rebeldía. Viendo a los grupos de entonces no es fácil saber si sus componentes tenían veinte años o cincuenta, y muchos músicos más maduros, acostumbrados a hacer coros de swing y otras músicas de orquesta, se vieron obligados a mutar rápidamente a hacer uuuus y duduás si querían seguir en activo. El propio Haley parece más un tío materno de la familia que agarra la guitarra tras la cena de Nochebuena que una estrella internacional.
En cuanto a la letra, parece una de esas en que cuando no se te ocurre nada, ponte a contar números, o días de la semana, o letras del alfabeto, y algo rimará con eso. El título, y todo el concepto de la canción, es un juego de palabras, ya que «around the clock» no solo significa literalmente «alrededor del reloj» sino también «todo el tiempo, sin parar». Por ejemplo, «estamos trabajando around the clock (sin descanso, sin detenerse) para terminar el proyecto a tiempo». Y así, durante la canción, el intérprete invita a su pareja no solo a bailar sin descanso, sino también «alrededor» de cada una de las horas del reloj, que se van mencionando en la letra. Vamos, una especie de «nos dieron las once y las doce y la una y las dos», pero en antiguo. Teniendo esto en cuenta, en la traducción se ha escogido dejar la idea literal de bailar alrededor del reloj… pero sin parar. Hasta las doce para coger resuello y luego volver a seguir. «Rock a todas horas» sería quizá la mejor traducción del título. En la segunda estrofa, «glad rags», literalmente «trapos alegres», es una manera desmitificadora de decir «ropa elegante». O sea, un trapito apañao. Y en cuanto al verbo «rock», que originalmente significa «moverse de lado a lado», sea meciéndose suavemente como una madre hace con la cuna de su bebé, o violentamente, como un barco en una tormenta, la palabra «rockear», aunque haya quien la odie, tiene tradición de décadas en español.
La canción, como se hacía entonces a menudo, tiene también versiones en otros idiomas, incluidas varias en español, donde obviamente la traducción ha de ser diferente para que rime y/o se ajuste a la métrica de cada verso para ser cantado.
Así que, se lea esto en Nochevieja o no, cuando la gente baila alrededor del reloj, feliz año a todos.
Bill Haley And His Comets en el show de Ed Sullivan
«El relojito», de Gloria Ríos, cantante mexicano-estadounidense (1958)
…and last but not least, Los Héroes y Sus Cansinos
Letra y traducción:
One, two, three o’clock, four o’clock rock.
Five, six, seven o’clock, eight o’clock rock.
Nine, ten, eleven o’clock, twelve o’clock rock.
We’re gonna rock around the clock tonight.
Put your glad rags on and join me, hon’.
We’ll have some fun when the clock strikes one.
We’re gonna rock around the clock tonight.
We’re gonna rock, rock, rock, ‘till broad daylight.
We’re gonna rock, gonna rock around the clock tonight.
When the clock strikes two, three and four
if the band slows down we’ll yell for more.
We’re gonna rock around the clock tonight.
We’re gonna rock, rock, rock, ‘till broad daylight.
We’re gonna rock, gonna rock around the clock tonight.
When the chimes ring five, six, and seven
we’ll be right in seventh heaven.
We’re gonna rock around the clock tonight.
We’re gonna rock, rock, rock, ‘till broad daylight.
We’re gonna rock, gonna rock around the clock tonight.
When it’s eight, nine, ten, eleven too
I’ll be goin’ strong and so will you.
We’re gonna rock around the clock tonight.
We’re gonna rock, rock, rock, ‘till broad daylight.
We’re gonna rock, gonna rock around the clock tonight.
When the clock strikes twelve we’ll cool off, then
start rockin’ ‘round the clock again.
We’re gonna rock around the clock tonight.
We’re gonna rock, rock, rock, ‘till broad daylight.
We’re gonna rock, gonna rock around the clock tonight.
—
Una, dos, tres en punto, cuatro en punto, rock.
Cinco, seis, siete en punto, ocho en punto, rock.
Nueve, diez, once en punto, doce en punto, rock.
Vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Ponte tus trapitos elegantes y únete a mí, cariño.
Nos divertiremos cuando el reloj dé la una.
Vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Vamos a rockear, rockear, rockear hasta que sea bien de día.
Vamos a rockear, vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Cuando el reloj dé las dos, las tres y las cuatro,
si la banda [de música] se ralentiza, gritaremos que toquen más.
Vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Vamos a rockear, rockear, rockear hasta que sea bien de día.
Vamos a rockear, vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Cuando las campanadas den las cinco, seis y siete,
estaremos en el séptimo cielo.
Vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Vamos a rockear, rockear, rockear hasta que sea bien de día.
Vamos a rockear, vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Cuando sean las ocho, las nueve, las diez, las once también
seguiré con fuerza y también tú.
Vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Vamos a rockear, rockear, rockear hasta que sea bien de día.
Vamos a rockear, vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Cuando el reloj dé las doce nos calmaremos, luego
empezaremos a rockear alrededor del reloj otra vez.
Vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Vamos a rockear, rockear, rockear hasta que sea bien de día.
Vamos a rockear, vamos a rockear alrededor del reloj esta noche.
Traducción de Rogorn Moradan
Buen trabajo. Bill Haley no es lo mejor de la década, pero esta canción no puede faltar en cualquier antología del R&R cincuentero. La letra no es ninguna cumbre literaria, pero ahí está la gracia: es sólo R&R, música para pasarlo bien, simple y sin pretensiones. Sigo diciendo que el más grande fue Eddie Cochran.