El 13 de septiembre de 1967 falleció Emilio Herrera, que diseñó el primer traje espacial, una escafandra estratonáutica que solucionó los problemas de resistencia a las temperaturas, del vacío, e incluso de la radiación solar. Su invento fue referencia para las vestimentas de los astronautas que protagonizaron la carrera espacial en la segunda mitad del siglo XX.
¿Quién fue Emilio Herrera?
Desde finales del siglo XIX y hasta principios del XX España fue la cuna de alguno de los más destacados inventores: Isaac Peral —que ideó el primer submarino torpedero a propulsión eléctrica—, Leonardo Torres Quevedo —creador del funicular que sobrevuela el río Niágara en el punto en el que el tumultuoso remolino da origen a las cataratas— y Juan de la Cierva —inventor del autogiro y precursor del helicóptero—. A este grupo de destacados pioneros de la aeronáutica se sumó el granadino Emilio Herrera —un apasionado de las novelas del escritor de género fantástico Julio Verne—, que colaboró con Torres Quevedo para intentar formar una compañía de transporte aéreo que uniese Europa y América con dirigibles; y con de la Cierva para levantar el Laboratorio Aerodinámico de Cuatro Vientos —que albergó en su momento el túnel más largo y moderno del mundo—.
¿Cómo era el traje especial que diseñó Emilio Herrera?
Emilio Herrera, después de colaborar en la construcción del autogiro, comenzó a obsesionarse con una idea: llevar a cabo un vuelo estratosférico a más de 20.000 metros de altura. Para llevar a cabo esta gesta era necesario construir un globo resistente, y también un traje especial para que el piloto pudiese soportar el frío y la presión atmosférica. Herrera utilizó tela, lana, cristal y plata para elaborar este prototipo, que además contaba con un micrófono dentro del casco —recubierto con aluminio y un cristal reforzado— para permitir la comunicación por radio. Este traje especial fue el modelo usado por la NASA 30 años después para fabricar los trajes de los astronautas que pisaron por primera vez la luna —el ingeniero andaluz murió dos años antes, pero Neil Armstrong quiso reconocer la importancia de sus trabajos, regalando una piedra lunar a uno de los discípulos de Herrera—. Sus éxitos tuvieron un reconocimiento internacional que no se vio refrendado en España. Después de la Guerra civil Emilio Herrera tuvo que huir a Francia, donde entabló amistad con Albert Einstein, y llegó a ser reclamado por la Alemania nazi para trabajar con ellos. Herrera se negó y fiel a su ideario político llegó a ser presidente de la República en el exilio.
Otras efemérides históricas del 13 de septiembre
El 13 de septiembre de 122 los romanos comenzaron la construcción del Muro de Adriano en el norte de Britania, la actual Inglaterra.
El 13 de septiembre de 1598 murió Felipe II, a la edad de 71 años, consumido por la gota y presa de terribles dolores.
El 13 de septiembre de 1759 los británicos vencieron a los franceses en la batalla de las Plaines d’Abraham, consiguiendo de esa forma el control de Canadá.
El 13 de septiembre de 1923 se produjo el golpe de estado de Miguel Primo de Rivera, apoyado por el rey Alfonso XIII, que dio comienzo a la dictadura militar que duró hasta su dimisión el 28 de enero de 1930.
El 13 de septiembre de 2007 se adoptó en la ONU la declaración sobre los derechos de los pueblos indígenas.
Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: