Muertos S. L., humor en la funeraria Torregrosa (Movistar Plus +)

Se trata de una comedia original de Laura y Alberto Caballero, fundadores de Contubernio Films, que consta de ocho episodios de treinta minutos de duración y se emitirá de dos en dos episodios cada semana.

Creada por Alberto Caballero, Daniel Deorador, Julián Sastre, Nando Abad y Araceli Álvarez de Sotomayor y dirigida por Laura Caballero, la serie comienza cuando fallece Gonzalo Torregrosa, propietario y fundador de Funeraria Torregrosa. Dámaso Carrillo (Carlos Areces), mano derecha del fundador en la empresa, cree que lo mejor para la continuidad del negocio es que él asuma el mando, pero contra todo pronóstico, Nieves (Ascen López), la septuagenaria viuda, asume la dirección de la empresa familiar, con el único apoyo del inútil de su yerno, Chemi (Diego Martín), experto en marketing. Mientras Dámaso conspira y manipula a sus compañeros contra la nueva dirección, la empresa se enfrenta a la dura competencia de la funeraria Transitus, que dirige la antigua becaria de Dámaso, Vanesa (Amaia Salamanca), y a su plan para expandir su negocio. Además, surge un caso a lo #MeToo que también amenazará el legado de Gonzalo Torregrosa.

Según Alberto Caballero, Muertos, S. L. nace de la necesidad de escribir una comedia sobre el último tipo de convivencia que les quedaba por tratar a él y a su hermana: la laboral. «Queríamos retomar el formato tradicional de sitcom pero con la estética de una producción actual de máximo nivel», señala el creador en las notas de producción de la serie, facilitadas a Efe por Movistar Plus+. El hecho de ambientarla en una funeraria, explica asimismo, «surgió a raíz de que nuestro tema favorito a la hora de escribir es la decadencia humana. Y no hay nada más decadente que morirse. Espiritualmente, podríamos decir que la famosa crisis de la mediana edad también ha tenido algo que ver. Nos divertía la idea de ver cómo una serie de personajes normalizan todo el proceso que rodea a la muerte, porque es su día a día y lo que les da de comer. Y cómo en un ambiente tan propenso al drama acaban surgiendo irremediablemente situaciones cómicas. Exactamente igual que en el mundo real porque, al final, el sentido del humor no es más que un mecanismo de defensa en esta tragicomedia», asegura.

En el reparto figuran también Roque Ruiz, como el becario Morales, recién llegado a la funeraria; Salva Reina, Nino, chófer del coche fúnebre, que le saca el mayor provecho posible al vehículo; Manuela la tanatoestética (Adriana Torrebejano), Olivia (Aitziber Garmendia), la recepcionista, y Abel (Gerald B. Fillmore), el tanatopractor, maniático, reservado, y gran amante de su trabajo.