Inicio > Historia > Nuevos momentos estelares de la humanidad > Primer éxito de David Bowie
Primer éxito de David Bowie

Hace ahora 55 años, el 31 de julio de 1969, la humanidad aún se congratulaba por la materialización de uno de sus sueños más largamente acariciados. Lo había hecho realidad diez días antes un pequeño paso de Neil Armstrong sobre la superficie del cuerpo celeste que, junto con el Sol, más había influido en la especie desde la noche de los tiempos. Al final fueron los americanos, pero aquel pequeño paseo del comandante Armstrong, pronunciando palabras cargadas de fraternidad, también parecía invitar a los soviéticos a la celebración. La Luna estaba alcanzada por el hombre —y la mujer—. Todos los hombres y todas las mujeres parecían haber acompañado a los estadounidenses a la Luna y un buen número de ellos había seguido con asombro la retransmisión televisiva del acontecimiento.

El interés que la hazaña despertaba en la Tierra —el Planeta Azul visto desde las inmensidades siderales— se hacía notar. Los niños, que aún jugaban en las calles de sus ciudades, se valían de miniaturas del Apollo 11 y del módulo lunar. Otras veces imitaban las voces de los operadores de los controles de las bases llamando a las naves.

"Sí señor, muchos de los de hace 55 años sintieron la marcha del Duke blanco, el último de los falsos nombres, como la de alguien muy cercano"

Ése precisamente era el asunto de “Space Oddity”, una canción de David Bowie que, hace hoy 55 años, acababa de entrar por primera vez en las listas de éxitos del Reino Unido —las del resto del mundo vendrían después—: el control de una base terrestre llamando inútilmente al mayor Tom. El astronauta, perdido en su cápsula lejos de la Luna, también lejos del Planeta Azul, estaba destinado a una muerte lenta y en soledad. Pero el contacto que Bowie y sus primeros seguidores tomaron entonces, a finales de julio de 1969, habría de prolongarse hasta la muerte del músico en 2016.

Sí señor, muchos de los de hace 55 años sintieron la marcha del Duke blanco, el último de los falsos nombres —heterónimos más que seudónimos, porque cada uno de ellos entrañaba su propia personalidad—, como la de alguien muy cercano, un tipo que los había acompañado desde la adolescencia hasta el ocaso llenando su vida de canciones inolvidables, de esas que siempre gusta escuchar porque te devuelven al tiempo en que las escuchabas con asiduidad o las escuchaste por primera vez.

"No fue hasta que la BBC decidió ponerla de sintonía de los especiales sobre el alunizaje emitidos con posterioridad cuando la canción empezó a gustar como ha venido haciéndolo hasta hoy"

En realidad, el propio Bowie era el mayor Tom —así lo contaría él mismo en “Ashes to Ashes” (1980), la segunda de las tres canciones que dedicó al personaje— y no fue el paseo del comandante Armstrong quien le inspiró. Fue la experiencia del doctor Dave Bowman (Keir Dullea) de 2001: Una odisea del espacio (Stanley Kubrick, 1968).

Sí es cierto que la Phillips, la discográfica que había grabado la canción en los estudios Trident de Londres el 20 de junio, quiso ponerla a la venta el 11 de julio para que ya estuviera movida por las emisoras radiofónicas cuando la previsible eclosión de lo espacial que habría de traer el alunizaje se hiciera realidad.

Sin embargo, no fue así. En los primeros días, “Space Oddity” no gustó como cabía esperar. No fue hasta que la BBC decidió ponerla de sintonía de los especiales sobre el alunizaje emitidos con posterioridad cuando la canción empezó a gustar como ha venido haciéndolo hasta hoy.

"Con los años, en Ashes to Ashes, Bowie daría entender que el mayor Tom era él mismo, que la canción fue escrita durante una breve y lamentable experiencia con la heroína"

Ya en noviembre sería el primer corte de la cara A del segundo álbum de Bowie. La ascendencia y caída de Ziggy Stardust y las arañas de Marte, sin duda la cima del rock sideral, llegaría en el 72. Para entonces, el repertorio ideal de este músico londinense ya contaba con varios de los temas que habrían de integrar la banda sonora de nuestras vidas: “Changes”, “Life On Mars?”, “Queen Bitch”, “Starman”, “Soul Love”… “Space Oddity” solo fue la primera pieza de tanta excelencia.

Con los años, en “Ashes to Ashes” Bowie daría entender que el mayor Tom era él mismo, que la canción fue escrita durante una breve y lamentable experiencia con la heroína. De ahí la alienación del astronauta, condenado a morir lejos de casa, tras comunicar con la Tierra, anunciar que su nave no funciona y pedir a su interlocutor que le despida de su mujer. Ya no se escriben canciones así.

“Space Oddity” integró los repertorios en directo de David Bowie prácticamente hasta el final de su carrera. Como heterónimo, no hay duda de que Ziggy Stardust fue más consistente. Pero el mayor Tom inspiró a muchos más músicos. En líneas generales, desde Def Leppard hasta Lana del Rey. Insistó; ya no se escriben canciones así.

4.9/5 (18 Puntuaciones. Valora este artículo, por favor)
Notificar por email
Notificar de
guest

2 Comentarios
Antiguos
Recientes Más votados
Feedbacks en línea
Ver todos los comentarios
Ray Lobo
Ray Lobo
8 meses hace

Space Oddity no pertenece a The Rise and Fall of ZIGGY STARDUST and the Spiders from Mars, su quinto álbum, de 1972, sino al segundo oficialmente cómo David Bowie (Antes grabó cómo David Jones) La canción formó parte de su segundo álbum, también conocido por el nombre homónimo de la canción, en 1969

https://www.discogs.com/master/32337-David-Bowie-David-Bowie

Gedeonín
Gedeonín
8 meses hace
Responder a  Ray Lobo

De dónde sacas tú que el autor dice que Space Oddity pertenece a The Rise and Fall of ZIGGY STARDUST and the Spiders from Mars. Hay un punto antes de que cite ese álbum, que cierra la frase donde afirma que Spertenece al segundo álbum, que saldría en noviembre del 69. Los puntos son para detenerse y diferenciar el sentido de las distintas frases. Hay que leer bien antes de venir a corregir a nadie.

  • Cracovia sabe

    /
    abril 21, 2025
    /

    La plaza es inmensa, un cuadrángulo de doscientos metros de lado. En el subsuelo hallaron calles pavimentadas de hace ocho siglos, sótanos de edificios desaparecidos, cabañas de artesanos y comerciantes, un tesoro de monedas, llaves, joyas, telas, huesos, flautas, dados. En un estrato aparecieron restos de la ciudad quemada y puntas de flecha que delataban la autoría: fueron los mongoles quienes incendiaron Cracovia en 1241. Una vértebra cervical limpiamente seccionada muestra la decapitación de invasores suecos en 1657. Los esqueletos de seis mujeres confirman las leyes antivampiros del siglo XI: las enterraron boca abajo en posición fetal, atadas y con…

    Leer más

  • Abusos sexuales, en La ley de la calle (XI)

    /
    abril 21, 2025
    /

    Este episodio, emitido el 16 de septiembre de 1989, tiene un protagonista especial, un reportero de raza, Jeremías Clemente, de Radio Nacional de Cáceres. Clemente escribió al programa para contarles la historia de un anciano, un estanquero de más de setenta años, que además de vender tabaco y chucherías era aficionado —presuntamente— a abusar de las niñas del pueblo.

  • Hasta que me sienta parte del mundo, de Ana Inés López

    /
    abril 21, 2025
    /

    *** toda junta qué lindo ir al cine un viernes suicida y que la película termine con amigo piedra y que los actores sean tan buenos y que se enamoren bailando   los viernes se me viene la vida encima toda junta y nunca nunca hay nadie que me salve yo no me puedo salvar de nada por ahora sé que mañana cambia porque pasa los viernes la depresión antigua   no me desespero como antes espero que me agarre el sueño mañana me despierto y en el medio cambió todo no tengo pesadillas   qué podría hacer? canciones? comidas?…

    Leer más

  • Periplos literarios

    /
    abril 21, 2025
    /

    Zarpar en un barco de tinta y papel, embarcarse en una travesía literaria a través de la lectura o un viaje tangible y real. Trazar una cartografía alternativa, comprobando cómo el paisaje se revela, muta y explota en resonancias bajo la mirada lectora, y cómo en ese ir y venir entre puerto y puerto se propicia un enriquecimiento personal. “Porque somos del tamaño de lo que vemos y no del tamaño de nuestra estatura”, nos dice Fernando Pessoa, y es que pareciera que tanto el viaje como la lectura nos potencian, expandiendo nuestros mundos internos, hurgando en una zona común…

    Leer más