Inicio > Libros > Infantil > Grandes regalos (III): Limoncito. Un cuento de Navidad, de Javier Sáez Castán

Grandes regalos (III): Limoncito. Un cuento de Navidad, de Javier Sáez Castán

Grandes regalos (III): Limoncito. Un cuento de Navidad, de Javier Sáez Castán

Merece ser celebrada a lo grande la recuperación de Limoncito, álbum de Javier Sáez Castán, figura cimera de la ilustración española de nuestro tiempo. El libro apareció por primera vez hace más de una década y vuelve ahora con pequeños retoques y nueva cubierta. En ella, Limoncito, un pequeño oso de peluche longilíneo, emerge de una lata de conservas de sopa de cangrejo. La ilustración es una obra maestra que condensa el sentido del libro y la estética de Sáez Castán: el humorismo simbólico, una risa abierta al misterio y a la representación de la vida en el filo de la oscuridad y la luz. Limoncito, con un costurón en forma de cruz en su pecho, hace un visaje cómico, se lleva los dedos a la boca mostrando una sonrisa. A su espalda, el círculo de la tapa de la lata, abierta, forma un nimbo. Limoncito será un cuento de Navidad con sabor antiguo (como un cuento de Dickens o un villancico de Vainica Doble). Será juguetón y trascendente. Traerá sorpresa y broma (el osito ha salido de la lata de sopa como aquellos antiguos juguetes de resorte), partiendo de un conocimiento serio de la existencia (gotas de la sopa manchan el suelo). Será ácido y dulce (como un limón), traerá luz final, como una Estrella de Belén.

"Una noche recibe una visita inesperada. Quien encarna el espíritu navideño que viene del pasado en este cuento es el viejo osito de peluche de su niñez"

Es difícil concentrar más significados desde el comienzo, volver a un cuento pasados los años y contarlo desde la tapa, con una sola imagen. En eso reside la fuerza de una imaginación educada y el talento artístico de un gran autor. Ya dentro, el lector asistirá a una historia navideña de redención, la de su protagonista, Elmer Campos. La presentación que de él hace Sáez Castán es ejemplar: con un retrato a doble página, recostado en un sofá, como una venus del materialismo degradado, como en los cuadros opresivos de Lucien Freud. Un bodegón elocuente (restos de pizza y cangrejo, latas de cerveza, cigarrillos aplastados, el mando de la televisión) explica el resto.

Elmer es un ser que ha perdido el rumbo de su vida y toda ilusión. Malvive sin oficio ni beneficio en la vieja casa de sus padres, solitario y condescendiente con su propio abandono. Una noche recibe una visita inesperada. Quien encarna el espíritu navideño que viene del pasado en este cuento es el viejo osito de peluche de su niñez. Gracias a él, en un viaje a través de los recuerdos (paródico y extraordinario en su eficacia narrativa —el modo en que Sáez Castán cuenta la historia de cómo el niño Elmer salvó su peluche de las dentelladas del perro de su vecina a través de tres instantáneas mudas es de antología—), el Elmer maduro recobrará la conciencia de su dignidad y afrontará un nuevo camino en la vida.

El álbum muestra con extraordinaria viveza el tránsito de la sombra a la luz, de lo siniestro (el cuento tiene mucho de terror, como es preceptivo en el género) a lo alegre. Como es habitual en Sáez Castán, está lleno de homenajes literarios y artísticos, de pequeños detalles de comunión con el ojo del lector entrenado. Fotografías, planos de cine (los retratos contrapicados, la doble página impactante de los estantes llenos de ositos manufacturados por los antepasados de Elmer, maestros jugueteros), efectos de luz… La planificación de las obras de Sáez Castán es siempre minuciosa, resultado de una imaginación concienzuda, juguetona y exigente. La fe en la luz requiere un magisterio de las sombras. Puede jugar quien conoce la gravedad del juego. Como muestra, un botón: el lector atento podrá seguir la presencia cuidadosa del símbolo de la estrella (la luz que conduce al Nacimiento y al renacer) en diferentes lugares y momentos de álbum (en el abeto navideño del principio, en la bandera que porta Limoncito cuando llega a la casa, en el pijama del pequeño Elmer, en el coche donde el Elmer adulto carga los viejos muñecos de sus padres una vez tomada la decisión de reconducir su vida…). Previo a ello hay un maravilloso paisaje nocturno con un cielo inflamado. Los interiores opresivos han cedido el espacio a un gran exterior vivo. Esto es un cuento de fe, de salvación, una historia de Navidad.

—————————————

Autor: Javier Sáez Castán. Título: Limoncito. Un cuento de Navidad. Editorial: Diego Pun Ediciones. Venta: Todos tus libros.

5/5 (3 Puntuaciones. Valora este artículo, por favor)
Notificar por email
Notificar de
guest

0 Comentarios
Feedbacks en línea
Ver todos los comentarios