«Las ciudades visitadas por Daniel Mordzinski no lo han sido en razón de sus bellezas naturales o sus vistas panorámicas. Esos lugares comunes han sido tajantemente sustituidos por lugares inusitados; las referencias habituales han quedado súbitamente elevadas al rango de excepcionales. No se ha retratado la naturaleza como tal, sino algunos de sus escondidos ingredientes físicos y humanos. Ya se sabe que detrás de cada realidad se agazapa un enigma. Averiguar de qué enigma se trata es tarea del artista». —Caballero Bonald en el prólogo de Ciudades para a(r)mar (Ámbito Cultural).
Rayuela
O de la tierra al cielo en diez pasos. El nacimiento de una hija. La primera vez en París. Estar frente a La Gioconda o la dama del armiño o ante Las meninas por primera vez. Escribir un buen poema. Desear que una perseida rasgue el cielo y que pase. Escuchar una canción que nunca olvidarás. Un sueño en una noche de verano. Perseguir una quimera. La lectura de una novela fundacional. Ciudades para a(r)mar.
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