El poeta gaditano Abraham Guerrero ha obtenido este viernes el 74º Premio Adonáis de Poesía por su obra Toda la violencia, según el fallo del jurado hecho público en la Biblioteca Nacional de España.
Según el fallo del jurado, el gaditano (1987) se ha alzado con este galardón por «haber alcanzado un admirable equilibrio entre el compromiso social, la poesía arraigada y el lirismo íntimo, entre los problemas de este tiempo y la literatura de siempre, entre la delicadeza de su mirada, la potencia de su voz y las aristas de la realidad».
A través de un mensaje grabado, ya que no ha podido viajar a Madrid debido a las restricciones de la pandemia, Guerrero ha agradecido el premio y ha reconocido sentir «orgullo» por haberlo recibido.
Durante la ceremonia celebrada en la Biblioteca Nacional de España, también se han entregado tres accésit «sin orden de prioridad». El primero de ellos ha sido entregado a Ignacio Pérez (Málaga, 1996) por su poemario Márgenes de error, una obra que el jurado ha elegido por «su invitación a explorar los límites de la vida y las violencias de la muerte, indagando en las catástrofes colectivas y con un lenguaje cuidado. En segundo lugar ha recibido un accésit Rodrigo Olay (Asturias, 1989) por Vieja escuela, una obra que destaca por «la fértil interacción de vida y literatura sustentada en una gran variedad de registros y en un sobresaliente dominio de la dicción clásica». Por último, también ha destacado la madrileña Marta Jiménez (1990) por La edad ligera, poemario al que el jurado ha elegido por su «lograda síntesis de frescura y profundidad sostenida, por un ritmo cautivador que es herencia de la tradición y a la vez propuesta novedosa».
Según ha dicho Carmelo Guillén Acosta, director de la colección, en esta edición del premio está «lo más granado de la poesía que se está escribiendo ahora mismo en este país, comparable al nivel de calidad que tenían los que se presentaban en los años 50, y que luego resultaron ser Francisco Brines, Caballero Bonald o Ángel González«. El jurado de esta edición, presidido por Guillén Acosta, también ha estado compuesto por Aurora Luque, Julio Martínez Mesanza, Amalia Bautista, Eloy Sánchez Rosillo y Enrique García-Máiquez. Según ha explicado Guillén Acosta, este año, y por primera vez desde 1999, no está el poeta Joaquín Benito de Lucas, quien a sus 86 años «se ve imposibilitado para seguir ejerciendo». Por eso, en su lugar han incluido a Amalia Bautista.
En su 74º edición, el Premio Adonáis de Poesía también ha tenido como finalistas a Jorge Solís, por Mundo malvado (Cáceres, 1991), Estefanía Cabello, por Cartas a Oklahoma (Córdoba, 1993), Daniel Arana por Cantos del desarraigo (Zaragoza, 1988), Luciana Jazmín Coronado por Los hijos imperfectos (Buenos Aires, Argentina, 1991) y Diego Medina por En vecindad, no en compañía (Málaga, 1985). Completan la lista de los 16 finalistas Marina Casado, por Bajo una luz tan alta (Madrid, 1989), Carla Nyman, por Movernos en la sed (Palma de Mallorca, 1996), Luis Escavy por Otra noche en el mundo (Murcia, 1994), Cristina Sanz por Oquedades (Madrid, 1989), Daniel Fernández por Precipitaciones moderadas (Madrid, 1988), Félix Moyano por Cuando llegue la hora (Córdoba, 1993) y Fernando García por Resurgencias (Chile, 1990).
El Premio Adonáis es uno de los galardones de poesía más prestigiosos, nació en 1943 y desde 1949 es concedido por Ediciones Rialp, que cuenta actualmente con más de 670 títulos que muestran la evolución de la poesía española durante las siete últimas décadas.
Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: