Iñaki Ezkerra (Bilbao, 1957) ha abordado casi todos los géneros en su larga trayectoria literaria. En 1998, la Universidad del País Vasco reunió en un volumen, bajo el título Otra ribera, sus cinco primeros poemarios traducidos al euskera, a los que después se sumaron otros dos: A tu lado en Islandia (2009) y Los sonetos marítimos (2010). Tiene, además, publicados dos libros de relatos, La caída del Caserío Usher (1991) e Historias de amor y de odior (2010) y, como ensayista, destaca su Tetralogía Vasca formada por Estado de Excepción (2001), ETA pro nobis (2002), Sabino Arana o la sentimentalidad totalitaria (2003) y Exiliados en democracia (2009). Pese a esa incursión en la literatura del compromiso político, en la que también se enmarca Los totalitarismos blandos, publicado en 2016, su primer ensayo, Marginalias (1996), se centraba en un tema literario, como lo hace ahora con La voz de la intemperie. El Gobierno Vasco le otorgó en 1983, por su novela El zumbido, el Premio Pío Baroja, acaso premonitorio del libro del que ha escrito este texto para Zenda.