El día 21 de octubre de 1600 tuvo lugar en Japón la Batalla de Sekigahara, que supuso un cambio importantísimo en la historia del país: terminó el periodo Sengoku y dio comienzo de la era Tokugawa durante la cual la nación asiática quedó unificada bajo un mismo poder.
¿Cómo fue la Batalla de Sekigahara?
Aunque la instauración del shogunato debería haber servido para dar estabilidad al país, las rivalidades entre los daimios llevaron a un gran enfrentamiento entre clanes. Japón se dividió entre los partidarios de Toyotomi (Oeste) y los de Tokugawa (Este). Los dos ejércitos se encontraron cerca de Kioto, en Sekigahara, con ventaja inicial para las fuerzas lideradas por Ishida Mitsunari, pero las deserciones —la más decisiva fue la de la familia Hideaki— y cambios de bando de sus aliados modificaron las posiciones en el campo de batalla. Los arcabuces de las tropas de los hombres de Tokugawa establecieron su dominio y a las cuatro de la tarde el ejército Tokugawa se había hecho con la victoria. Mitsunari no pudo ser capturado hasta unos día más tarde, pero sí que atraparon a la mayoría de sus generales, a los que decapitaron siguiendo la ceremonia ritual —después de cortadas sus cabezas fueron lavadas y peinadas y sus dientes teñidos de negro para que fuesen expuestas en el campamento—.
¿Qué pasó después de la Batalla de Sekigahara?
La victoria del clan Tokugawa dio paso al periodo Edo, que trasladó la capital de Japón a Tokio. Comenzaba de esta forma una de las etapas más importantes de esta nación que duró hasta finales del siglo XIX. Esta época estuvo caracterizada por la transformación del shogunato a una dictadura militar, en la cual los samuráis acaparaban todo el poder, y por el aislacionismo de Japón con el cierre de las fronteras. El país nipón vivió durante este tiempo en una paz casi continúa gracias, sobre todo, a una medida impulsada después de la Batalla de Sekigahara, el sankin-kôtai, que obligaba a los señores feudales a residir en Edo durante un año y al siguiente, cuando regresaban a sus tierras, debían dejar a sus familiares como garantía en la capital. La restauración Meji acabó con la incomunicación y abrió a Japón al mundo de una forma traumática después de 250 años sin tener contacto con otras naciones.
Otras efemérides históricas del 21 de octubre
El 21 de octubre de 1094 El Cid derrotó a las tropas de los almorávides en la Batalla de Cuarte.
El 21 de octubre de 1496 tuvo lugar el matrimonio de Juana de Castilla y Felipe el Hermoso, un hecho crucial en el futuro de España, del Sacro Imperio Germánico y del Nuevo Mundo.
El 21 de octubre de 1600 Tokugawa Ieyasu se convirtió en el gobernante de Japón después de derrotar al clan Toyotomi.
El 21 de octubre de 1805 el almirante inglés Horatio Nelson murió en la Batalla de Trafalgar.
-
Ecos que el tiempo no acalla
/abril 12, 2025/Hoy hablamos de Edgar Allan Poe (1809-1849), cuyos Cuentos completos (Páginas de Espuma, 2025) acaban de publicarse en la que, con toda probabilidad, es la edición definitiva del titán de Boston: íntegros, comentados, ilustrados, con una traducción especializada, y en un formato de lo más atractivo. El volumen está coordinado por dos pesos pesados de la narrativa en castellano: Fernando Iwasaki (1961) y Jorge Volpi (1968). Además, cuenta con sendos prólogos a cargo de dos auténticas maestras del terror y lo inquietante —las mismísimas Mariana Enriquez (1973) y Patricia Esteban Erlés (1972)—, una traducción reluciente realizada por Rafael Accorinti y…
-
Las 7 mejores películas judiciales para ver en Filmin
/abril 12, 2025/1. 12 hombres sin piedad (12 Angry Men, Sidney Lumet, 1957) 2. Testigo de cargo (Witness for the Prosecution, Billy Wilder, 1957) 3. Anatomía de un asesinato (Anatomy of a Murder, Otto Preminger, 1959) 4. Algunos hombres buenos (A Few Good Men, Rob Reiner, 1992) 5. Anatomía de una caída (Anatomie d’une chute, Justine Triet, 2023) 6. Saint Omer (Alice Diop, 2022) 7. Veredicto final (The Verdict, Sidney Lumet, 1982)
-
Gombrowicz: La escritura imperecedera
/abril 12, 2025/No debemos olvidar a quienes, haciendo novela o ensayo, no dejan de escribir en torno a sus íntimas pulsiones y avatares, tal es el caso de Proust, Cansinos Assens, Canetti, Pavese, Pitol, Vila-Matas, Trapiello… Dado que los escritores no son gente de fiar, eso que se nos ofrece como «diario» con frecuencia no es tal cosa, pues hay sobrados ejemplos de obras presentadas como tales cuando en realidad no hacen sino mostrarnos, sin ataduras, el atelier donde el autor se refugia para crear. Por no hablar de los textos auterreferenciales como, por ejemplo, los Cuadernos de Paul Valéry —trabajo inconmensurable…
-
5 poemas de Ferozmente mansa, de Amelia Lícheva
/abril 12, 2025/Dice Gema Estudillo que la voz poética de Amelia Lícheva filtra, analiza y comprende la vida y que es necesaria para traducir el mundo. Y añade: “La vida cotidiana, las relaciones interpersonales, los problemas sociales o la incomunicación son algunos de los temas para los que Lícheva debe conformar ese lenguaje nuevo. Sus logros no pasarán desapercibidos para el buen lector”. En Zenda reproducimos cinco poemas de Ferozmente mansa (La tortuga búlgara), de Amelia Lícheva. *** Último tango La tarde trata de recordarse a sí misma ligero el viento y blancas nubes, pero el sol no se rinde y brillando…
Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: