De Conatus, la editorial madrileña liderada por Beatriz González y Silvia Bardelás, invitan a los lectores a ser cómplices de una fiesta dedicada a las otras identidades que nos ofrece la literatura.
Es una oportunidad para que todos los que comparten el mundo literario: escritores, lectores, críticos, libreros, correctores, editores, cualquiera con sensibilidad literaria, se conozcan y puedan interactuar en un ambiente no institucional. El carnaval literario será el 22 de abril en el jardín de Bocanegra de 22:30 a 2:00.
Beatriz González y Silvia Bardelás consideran que “Siempre hemos vivido el carnaval con mucho entusiasmo por varias razones: porque podías ser otra durante un tiempo, porque dejabas de ser tú misma y descansabas de la pesadez de tener que responder todos los días a una imagen construida y porque no lo hacías sola, sino que lo hacíamos todos”.
La literatura en el fondo es un carnaval muy sofisticado. El lector se convierte en un personaje de verdad, vive y siente lo que nunca viviría y además con consciencia, con la sensibilidad de ese otro. Si el carnaval es una fiesta ancestral no lo es sólo por la liberación que suponía con respecto a la cuaresma, por ejemplo, o por dar la bienvenida a la primavera, sino también porque una sola vida no nos resulta suficiente.
En De Conatus entienden así la literatura, sus editoras aseguran que “nos interesan los libros que lleven al lector a tener nuevas vidas de manera consciente y desde ahí a ver la suya propia con distancia. Y qué mejor que un carnaval real para celebrarlo. Por eso hemos organizado una fiesta de disfraces para cerrar la noche de los libros, para conocernos desde lo que somos todos los que conformamos el mundo literario: lectores”.
En este Carnaval literario habrá photocall para rememorar la noche en redes. Se trata de pensar en la construcción del personaje o autor/a a la hora de elegir el disfraz.
Una increible fiesta para la literatura. El espiritu de los carnavales siempre estarán ahi. La persona que fué al evento disfrazada de maléfica con su vestido de plumas negras fué la inspiración de la fiesta, divina de la muerte.