Carta a los zendianos

No sé si al resto de los prisioneros les ocurre, pero este galeón aventurero zarpó en un momento vital y anímico tan luminoso como un verano de Pavese o una gesta mosquetera. Entonces mi capacidad de trabajo crecía exponencialmente. Sentía una curiosidad exagerada por todo y un insomnio prodigioso que me permitía escribir, leer y transcribir sin pausa. Comencé haciendo entrevistas y crónicas, también reseñas. Gané confianza trabajando con los zendianos.

Además de una novela y dos libros de los que fui negro, Zenda me empujaba a escribir con libertad. Zarpé en una nave de periodismo literario de la que no me apetecía salir. Zenda asistió a episodios como aquel Fernando Aramburu que irrumpió con Patria, un libro que alcanza ya las 37 ediciones y que resulta ineludible para entender la literatura contemporánea española. Como ésa, el territorio de Ruritania presenció y hasta propició tormentas literarias prodigiosas.

La primera fiesta de aniversario de Zenda se celebró en 2017 en el Círculo de Bellas Artes. David Gistau aún vivía. Lo veo posar en una foto de esa tarde junto a Arturo Pérez-Reverte, Antonio Lucas y Edu Galán. Recuerdo, también que en aquel cóctel coincidió gente que difícilmente podría reunirse en otro tipo de evento: Jesús Cintora y Juan Manuel de Prada, sin ir más lejos. En aquella fiesta había de todo. Desde los principales periodistas de cultura de distintas cabeceras, también políticos, libreros, editores, grafiteros, músicos, fotógrafos y escritores.

Zenda es para mí la historia de una amistad. Desde Arturo Pérez-Reverte, con quien siento la cercanía de un amigo y la camaradería del tipo Gran Capitán —quienes me conocen saben que así llamo a mi padre—, pero también con Leandro Pérez y Miguel Santamarina, un dúo dinámico; Jeosm, el hombre que fotografía titulares, así como amistades que surgieron a bordo de esta nave, la de Ignacio Camacho y María José Solano Franco.

He visto pocos proyectos capaces de crear vínculos tan estrechos como lo ha hecho Zenda. No somos afelpados ni complacientes, pero tampoco desenvainamos el sable sin motivo. Nos interesa la pluralidad y por eso me siento cómoda a bordo de este barco. Quiso el azar que nos diera tiempo de presentar Heroínas, el tercer volumen gratuito que edita Zenda con el patrocinio de Iberdrola, y que tuvo como coordinador a Juan Gómez Jurado. El próximo año, estoy segura, volveremos a juntarnos.