Patricia Almarcegui ha escrito una carta de amor a Menorca e Irán a través de una novela en la que dos mujeres, una de cada uno de esos lugares, coinciden en un hotel abandonado que ha sido ocupado. Las dos protagonistas de Las vidas que no viví descubrirán enseguida que, pese a sus orígenes diferentes, tiene muchas cosas en común.
En este making of Patricia Almarcegui cuenta el origen de Las vidas que no viví (Candaya).
***
El trabajo de mi tercera novela, Las vidas que no viví, ha sido largo. Empezó hace cinco años y ha dado lugar a tres manuscritos. Posiblemente, ha sido el libro que más dudas me ha generado. El origen arranca con una treintena de entrevistas a mujeres de nacionalidades y tres generaciones diversas. A todas les pregunté lo mismo: en qué situaciones laborales, sentimentales, familiares, etc. se habían sentido en inferioridad de condiciones respecto a los hombres. Desde el principio supe que no quería hacer una compilación de entrevistas ni un libro de no ficción. Cómo crear unas voces que pudieran transmitir la intensidad de lo que me habían contado y de lo que quería contar.
Hice una lista de los acontecimientos y acciones que habían surgido en las entrevistas y luego creé tres voces. Una mujer de Barcelona, otra de Yazd y una tercera de Tokio. Era el primer manuscrito y las voces se alternaban. Se titulaba La herida. Más tarde decidí que la japonesa (una actriz de veinte años) desapareciera. Quedaron Pari (iraní de 75 años, que se ha mantenido desde el comienzo) y Anna. No sé cuándo decidí que ella sería menorquina, pero eso, creo, ha sido uno de los encuentros del libro. He vivido los últimos diez años en la isla, los lugares pueden llegar a determinar y generar los relatos, y encontrar una voz para ella tendría que ver también con mi experiencia aquí. Irán y Menorca son los sitios de mis afectos de los últimos años.
Usé la misma poética de mi penúltimo libro, el fragmento: me permitía trabajar más el lenguaje y buscar un tono de mayor intensidad. Había acontecimientos que obligatoriamente tendrían que tener una extensión más grande: el aborto, la excursión al faro, el préstamo y la peluquería. Los hechos, en definitiva, que van trazando las vidas que viven y que no viven las dos protagonistas. Y mientras, se colaron mis otros intereses y obsesiones de estos años: la maternidad, el derecho a la vivienda, la gentrificación, el turismo y lo que hoy se denomina la liternatura (travel writing), a través del huerto y el jardín. Espacios en los que crecen las protagonistas y que las definen, y que permiten además ir desplegando multitud de cuestiones que tienen que ver con la naturaleza y el paisaje en la actualidad, dos espacios que deben redefinirse en plena crisis climática.
A Anna y Pari las imaginé en una larga conversación y, a medida que hablaban de Irán y Menorca, surgió una escritura a medias mítica a medias cronística que en el último manuscrito decidí que fuera una tercera voz. La única que hablaría en tercera persona, frente a la primera de ellas. Las tres voces se alternarían, y dividí la novela en tres partes. Surgieron catástrofes naturales, naufragios, conquistas y revoluciones. Circunstancias no elegidas por los menorquines e iraníes pero que han configurado sus vidas y destinos y son, algunas, casi desconocidas. A veces también se han deslizado frases, versos, ideas de las deudas artísticas de estos cinco años: Nizami, Beauvoir, Farrojzad, Hafez, Panahi, Rubio i Tuduri.
Luego están las imágenes sensitivas, el ritmo de palabras y sintagmas, los puntos y aparte y la forma de la página, el lenguaje poético, todo aquello que puede devolver el tiempo real de los acontecimientos que se cuentan Anna, Pari, Menorca e Irán. Como esas frases sueltas que pertenecen a algunas de las entrevistas de las mujeres pero podrían ser versos de Hafez y que, al igual que en su poesía, no se resuelven, pero denuncian y restituyen lo que sintieron, y flotan en la página como un mensaje a veces iniciático y a veces de alarma. “De qué tiene memoria este jardín”.
—————————————
Autora: Patricia Almarcegui. Título: Las vidas que no viví. Editorial: Candaya. Venta: Todostuslibros, Amazon, Fnac y Casa del Libro.
-
Las 7 mejores películas de la II Guerra Mundial para ver en Filmin
/abril 26, 2025/1. Masacre / Ven y mira (Idi i smotri, Elem Klimov, 1985) 2. Paisà (Roberto Rossellini, 1946) 3. La delgada línea roja (The Thin Red Line, Terrence Malick, 1998) 4. El submarino (Das Boot, Wolfgang Petersen, 1981) 5. La infancia de Iván (Ivanovo detstvo, Andrei Tarkovsky, 1962) 6. Europa, Europa (Agnieszka Holland, 1990) 7. El silencio del mar (Le silence de la mer, Jean-Pierre Melville, 1949)
-
Fiel a sí mismo
/abril 26, 2025/Por él sabemos que Hey! ha sonado en el espacio y que Julio a secas ganó la batalla de brebajes entre Pepsi y Coca-Cola a Michael Jackson, que se quedó los dominios locales del refresco más azucarado, mientras Julio a secas saciaba su sed a escala planetaria y añadía más chispa a su vida. Sí, el primer artista global en el sentido actual del término fue el hombre que salió de aquel niño de derechas criado en el barrio madrileño de Argüelles. Él diría que la vida ha transcurrido en un suspiro, el que va de aparecer en conciertos de…
-
El trabajo sin trabajo ni propósito
/abril 26, 2025/La novela, como digo, tiene mucho humor (más del habitual en la autora) y, pese a todo, nunca levanta los pies del suelo, como sí lo hacían los ejemplos anteriores. No hay nada onírico ni esperpéntico a niveles inverosímiles, sino una historia aterrizada y divertida sobre el tedio, la frustración y el sinsentido de una rutina administrativa que no parece dirigida hacia ninguna parte. La narración comienza, con paso tranquilo, cuando Sara acude a su nuevo puesto de interina en una oficina administrativa y, con estupor, se descubre sola, sentada en una mesa apartada durante varios días, sin recibir instrucciones….
-
Cómo suena Una canción de mar
/abril 26, 2025/Esta novela histórica de aventuras rinde homenaje al periodo de esplendor de la Armada española durante aquella época en la que navegar era un arte y una ciencia, y en la que la Marina británica era un objetivo a batir. En esta ficción, además, se cuenta la historia de una gran amistad. En este Making Of, Juan Luis Gomar Hoyos relata el origen de Una canción de mar (Desperta Ferro). *** Por ello, la historia de una persecución naval a un convoy inglés en la que confluyen navíos de línea, espías al otro lado del Canal de la Mancha, el…
Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: