Llega un año más la cita literaria más esperada de la capital, la Feria del Libro de Madrid en el Retiro. Una ocasión excepcional en la que libreros, editoriales e instituciones abren sus stands a los lectores. Diecisiete días de trasiego y actividades en los que el protagonista es, de nuevo, el libro.
Dejamos atrás la feria de las vanidades en que se había convertido la Feria del Libro de Madrid. En esta edición la apuesta firme es la literatura: Coetzee, el Nobel, es uno de los visitantes más ilustres de este año. Además, Rumanía es el país invitado: Mircea Cărtărescu participó en la inauguración del pasado viernes. Ioana Parvulescu, Iona Nicolaie, Adina Popescu y la poeta Ana Blandiana han confirmado su presencia estos días.
Un día antes de la inauguración muchos editores y libreros se santiguaron ante la amenaza climatológica. La tarde del jueves el Parque del Retiro permaneció cerrado debido a la alerta roja por vientos de más de 90 km/h.
Una tormenta eléctrica en la Feria es ya un clásico, como lo son que libreros, editores, autores y lectores se conviertan en nuestra brújula para encontrar títulos (pídanles consejo) y que Zenda recorra con ustedes las 363 casetas —llenas de libros y cultura— que les esperan en el centro de Madrid. La Feria nace vestida de lluvia (y, por ello, sin acto inaugural), buen augurio para el sector, que muy lentamente va recuperándose de la crisis.
Es éste un domingo efervescente de actividades. En la carpa de firmas el escritor Arturo Pérez-Reverte comienza el día con la firma de ejemplares de su última obra Los perros duros no bailan (Alfaguara). Fiel a la Feria en los últimos años, trae su última novedad tras Eva: la citada novela de aventuras protagonizada por Negro. A la pregunta sobre el consejo que daría a un autor primerizo en la Feria, Arturo responde: «Que no tenga prisa en publicar, pero sí en leer». Uno de los autores primerizos que nos encontramos en nuestro paseo es Juan Pedro Iglesias, que publica su antología de poemas este otoño con la editorial Libroscom.
En Sílex firma Pedro Montoliú su título De la dictadura a la democracia: «un reto importante —nos comenta el autor— para poder sintetizar las entrevistas a 40 personajes relevantes de diferentes campos’. Nos cruzamos con Miguel Ángel Hernández, que corre a la caseta de la editorial Anagrama para firmar ejemplares de El dolor de los demás, su última novela, que aborda un suceso real y que se ha convertido en uno de los libros más solicitados de los últimos meses. Hernández augura una buena feria: “Lo importante es el contacto con los lectores”, concluye. De ese contacto sabe mucho el poeta César Brandon (Las almas de Brandon, Espasa) que se estrena como autor y durante su abarrotada firma recibe propuesta de matrimonio de una de sus lectoras.
Marcos Chicot, finalista del premio Planeta en 2016, vuelve a la Feria del Libro. La realidad supera las expectativas de este autor que prefiere dedicar varios minutos a sus lectores, crear un corrillo, una conversación. “La Feria me dibuja una sonrisa”, confiesa el autor, que se muestra encantado de poder compartir su ilusión con los lectores. A pocos metros de él firma el incombustible Joaquín M. Barrero (su última novela es Las esquinas rotas de Ediciones B), que a sus ochenta años continúa cerrando firmas y presentaciones.
Juan Eslava Galán mantiene las mismas expectativas que todos los años: «Encontrar a lectores a los que les haya gustado los libros que he escrito». Damos fe del feliz cumplimiento de este deseo, pues varias decenas esperaban pacientes una dedicatoria. Marta Sanz admite antes de posar, en las cercanías de la caseta, que «a pesar de haber empezado en barca, la Feria está yendo muy bien».
Emilio Lara firma ejemplares de El relojero de la puerta del Sol (editado por Edhasa, Premio de la Crítica de Andalucía) y nos habla de la experiencia de escribir en Bajo dos banderas: «Una muy buena experiencia. Arturo tiene el olfato literario para convertir lo literario en periodístico y viceversa. Este tema (la participación española en la Guerra de la Independencia de los Estados Unidos) era un territorio virgen para la novela histórica».
También firma en esta soleada mañana un sonriente Antonio Pérez Henares que tiene buenos augurios para la Feria, pues está notando, dice, una aceleración en su libro (La canción del bisonte, Ediciones B): «Noto que el mensaje del libro está llegando a los lectores». De esta obra están destacando la creación de sus potentes personajes. Sobre los personajes femeninos Pérez Henares tiene una especial querencia hacia Ababol, con quien se siente muy identificado.
María Dueñas afirma que las protagonistas de su última novela (Las hijas del capitán, editado por Planeta) seguramente comprarían en la Feria ejemplares de El tiempo entre costuras. Argumenta: «Creo que tanto ellas como Sira, al ser de la misma edad y época, acabarían siendo amigas», antes de continuar firmando, aligerando la cola de lectores que esperan su dedicatoria.
Que Juan Gómez-Jurado es un autor que se entrega en cada firma es ya una obviedad. Y le encontramos encaramado sobre una de las mesas, abrazando a sus lectores y desvelándoles (guárdenme el secreto) la fecha de lanzamiento de su próxima obra: 8 de noviembre. El autor de novelas como Cicatriz o El paciente declara que para él el libro de la Feria es Los perros duros no bailan de Pérez-Reverte, libro que le ha gustado mucho.
Almudena Grandes firma a dos generaciones de lectoras y desvela que para ella «son más bajas las expectativas que las cosas que le pasan. En la Feria me pasan cosas extraordinarias».
La ilustradora María Hesse firma ejemplares de sus dos biografías (Bowie y Frida Kahlo editadas por Lumen) y recomienda leer La teoría del King Kong de Virginie Despentes. Un libro que «le vendría bien a cualquier persona».
Roberto Santiago dedica ejemplares de Ana (editada por Planeta) y de sus Futbolísimos (SM) a muchos jóvenes lectores. Durante su firma aparece Roberto Rodríguez, actor que interpreta a uno de los protagonistas de la primera película inspirada en esta popular saga. El joven actor recomienda leerlos todos, “todos están bien, son graciosos”. A su lado Santiago nos da dos pistas literarias: Las hijas del capitán de María Dueñas para adultos y para los más pequeños La niña invisible (Premio El barco de vapor 2018) de Puño, un libro, del que dice, es «maravilloso».
Una risueña Pilar Cernuda firma ejemplares de su novela Volveré a buscarte (La Esfera de los libros) y recomienda la lectura de la última obra de Javier Marías, Berta Isla (Alfaguara). Marías lanza, mientras atiende a sus lectores, una recomendación al autor novel: «Que le guste más escribir que ser escritor».
A mitad de nuestro recorrido nos encontramos con el periodista Juan Cruz (que firmará la semana próxima) y que posa sonriente para Victoria. El cubano Leonardo Padura nos asegura que «la Feria ha logrado una identidad relacionada con el lugar, el parque del Retiro. En esta Feria —continua— los autores no son lo más importante, lo importante son los lectores». Y nos lo susurra como en un beso cómplice.
Lorenzo Silva trae a la Feria nueva novela, Lejos del corazón —nueva entrega de la historia de Bevilacqua y Chamorro— y recomienda una obra que “es un cruce entre Lolita y La ventana indiscreta”: “Mírame” de Antonio Ungar. A su lado la periodista Gloria Lomana confirma que su libro apuesta para esta Feria del libro es Las hijas del capitán de María Dueñas, «una historia apasionante de mujeres que merece la pena leer».
Inés Plana recomienda su novela Morir no es lo que más duele (Planeta) mientras que María Martínez Bautista (autora de Galgos, editado por La bella Varsovia) se atreve con varios títulos: El territorio interior (de Yves Bonnefoy, editado por Sexto Piso), El detalle de Daniel Arasse y El libro de Marco Aurelio (Antonio de Guevara). Junto a ella la escritora María Sánchez (que firma ejemplares de su Cuaderno de campo editado por La bella Varsovia) destaca tres obras: La teoría del King Kong, la trilogía De sus fatigas de John Berger y Un lugar pagano de Edna O’Brien (Errata Naturae). Ambas salen de la caseta para posar delante de Victoria Iglesias.
Leticia Dolera se estrena como escritora y en la Feria firma ya la quinta edición de Morder la manzana (Planeta). Recomienda dos novelas: Quiéreme siempre de Nuria Gago que ganó el Azorín de novela y la segunda parte de “No soy un monstruo”, que lleva por título La química del odio (Espasa) de la periodista Carmen Chaparro. Chaparro recomienda Morder la manzana de Leticia Dolera.
Conversamos con Cristina López Barrio, finalista del Planeta, que apuesta como libro de la Feria por Las hijas del capitán de María Dueñas, y nos comenta sobre su participación en Bajo dos banderas: “Me ha gustado muchísimo. Quería volver al cuento, empecé haciendo cuentos en el taller de Clara Obligado. Es un género más difícil que la novela. Este libro me ha dado la oportunidad de volver a escribir cuento y de poder leer los de mis compañeros. Es una obra compleja, con historias muy distintas”.
Alejandro Palomas que está firmando el reciente Premio Nadal, Un amor dice que espera que el libro de la Feria sea de Cărtărescu. Aunque antes de irnos nos confiesa que lo que realmente le gustaría es que el libro de la Feria lo firme una mujer. Y, “aunque no sea de este año… Aroa Moreno y La hija del comunista, me encantaría que fuera el libro de esta Feria”. Y los ojos le brillan al revelarse lector de Moreno. Terminamos el paseo con Manuel Vilas, que abandona momentáneamente la caseta —y la firma de su fantástica Ordesa— para posar ante la cámara. Sobre esta pregunta común acerca de su apuesta como libro de esta Feria, se ríe y exclama: «¡El mío! ¡Nos ha jodido!».
Salimos de la Feria con nuestro botín en las bolsas de papel acicaladas con el precioso diseño del cartel de Paula Bonet. Notamos el latido de las historias encerradas en las páginas de estas obras. Se confirma que, de nuevo, volvemos a sentir lo importante, el libro, el pálpito genuino del corazón de la Feria.
Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: