Reunidos en el Café Varela de Madrid el lunes 25 de octubre de 2021, el jurado del premio Café Varela decidió conceder el premio de este año al escritor y cineasta David Rodríguez Trueba.
La obra audiovisual de David Trueba nos regala una lección esencial para entender con imágenes y hablas nuestro país y nuestra cultura reciente. Esto se puede comprobar en sus películas La buena vida; Soldados de Salamina; La silla de Fernando, codirigida con su amigo Luis Alegre; Madrid, 1987; Vivir es fácil; Casi 40; Si me borrara el tiempo lo que yo canto o su reciente estreno A este lado del mundo. Si hablamos de sus trabajos audiovisuales tampoco nos podemos olvidar de su celebradísima serie ¿Qué fue de Jorge Sanz?, estrenada en 2010 y que documenta la vida de «un» Jorge Sanz muy real. Como escritor, los guiones de Los peores años de nuestra vida, La niña de tus ojos o la premiada El olvido que seremos, junto con sus novelas Saber perder, Blitz, Cuatro amigos o Queridos niños arman una voz propia que no para de buscar retos en la ficción. Finalmente, la labor de David como columnista nos descubre varias veces por semana en El País una perspectiva nueva e inteligente sobre el mundo que nos rodea.
Por su trabajo en estas disciplinas ha recibido varios premios Goya, el premio Feroz, el premio al mejor director en el Festival de Málaga, el Premio Nacional de Literatura, la Medalla del Círculo de Escritores cinematográficos o, este mismo año, el Premio Platino al mejor guion por El olvido que seremos.
Como resume uno de los miembros del jurado, el periodista Manuel Jabois, «se trata de uno de los más grandes de la ficción de nuestro tiempo, tanto en cine como en literatura, y un tipo honesto y veraz y auténtico. Podría decirse aquí esa cursilada de que el Varela ha ganado un Trueba; hoy, por él, está justificada».
El veinticinco de octubre se otorgó con este acta del jurado y el tres de diciembre se entregó el premio Varela a David Trueba, cineasta, escritor y columnista de El País. La cena en el céntrico restaurante Varela de Madrid fue el colofón al tiempo de espera. Allí estaban sus hermanos, Fernando y Jesús Trueba, y también el embajador de Rusia, Yuri Korchagin, Ana Belén y Víctor Manuel, Miguel Ríos, Cándido Conde Pumpido, Jordi Gracia, Javier Zaragoza, Manuel Otero, Antonio Lucas, Manuel Jabois, Edu Madina, Borja Sémper, Bárbara Goenaga, María Barranco, Edu Galán, Marta Flich, Fran Nixon, David San José, Gonzo, Lara Siscar, Darío Villanueva, Martín Caparrós, Marta Nebot, Juan Manuel de Prada, Gonzalo Cortizo, José Ribagorda, Pedro Simón, Guillermo Rodríguez, Ignacio Escolar, Fátima Caballero, Santiago Pedraz, Esther Doña, Xabier Fortes…
Y allí también estaba Rosa León, que regresó brevemente al directo para cantar «Probablemente esto sea amor», una canción escrita por David Trueba y por ella, con los gigantes Fran Nixon y David San José a las guitarras y los asistentes a los coros. Se demostró que Rosa sigue manteniendo todo lo que le aúpa a la galería de los mayores talentos de este país.
Y allí también estuvo El Gran Wyoming, que casi dio por difunto el acto en su discurso, asegurando que Trueba no ha llegado al éxito como él: trabaja demasiado y gana poco dinero. El público, a esas alturas, estaba rendido.
Y allí terminó David Trueba con la noche del Premio Varela, celebrando la reunión de amigas y amigos; celebrando a Azcona —habitual del Varela—; celebrando su obra —la que Marta Flich junto a un speaker dejaron por enumerada y aplaudida—; celebrando a Melquíades Álvarez, uno de los dueños del Varela; celebrando a sus camareras y camareros; y celebrando que cuando Trueba estaba hablando aún quedaba mucha más obra, mucha más noche, mucha más vida, por delante. A cambio, el respetable le cantó al galardonado «presidente, presidente», pero es muy posible que nadie les vaya a hacer caso. Qué más da. Es lo que tiene la felicidad.
Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: