El crimen del siglo, la historia de la gran epidemia de Estados Unidos

Con la ayuda de denunciantes, personas con información privilegiada, documentos recientemente filtrados, entrevistas exclusivas y acceso a las investigaciones, y con aportes de expertos profesionales médicos, periodistas, agentes y exagentes gubernamentales, abogados y representantes de ventas farmacéuticas, así como con el revelador testimonio de las víctimas de adicción a los opiáceos, la exposición de Gibney postula que las compañías farmacéuticas son, de hecho, en gran parte responsables de crear la misma crisis de la que se benefician, por valor de miles de millones de dólares… y cientos de miles de vidas.

La crisis de los opiáceos ha causado un país devastado por la codicia corporativa y traicionado por algunos de sus propios funcionarios electos, tras la promoción agresiva del OxyContin, una droga altamente adictiva del gigante farmacéutico familiar Purdue Pharma. La primera parte del documental se centra en cómo Purdue trabajó en estrecha colaboración con la Administración de Medicamentos y Alimentos para obtener la aprobación de analgésicos altamente rentables para un uso más amplio, promoviendo su seguridad sin pruebas suficientes y creando una campaña para redefinir el dolor y cómo lo tratamos. Cuando los reguladores del gobierno o los funcionarios del Departamento de Justicia intentaron mitigar las irregularidades, Purdue Pharma y grandes distribuidores de opiáceos como Cardinal Health resolvían los casos, manteniendo los detalles en privado y continuando sin cesar. Mientras decenas de miles de personas sucumbían a la adicción a los opioides, las fortunas construidas por el negocio de los opiáceos se convirtieron en el crimen del siglo, y el mercado que el OxyContin había abierto allanó el camino para medicamentos recetados aún más letales.

Participan en la primera parte el autor Patrick Radden Keefe; el especialista en opiáceos, el doctor Andrew Kolodny; el ex representante de ventas de Purdue, Mark Ross; la doctora Anne Lembke, especialista en adicciones de Stanford; la doctora Lynn Webster, fundadora de Life Tree Pain Clinic; Roy Bosley, cuya esposa murió de una sobredosis de opiáceos; el autor y reportero del New York Times Barry Meier; el médico de atención primaria doctor Art Van Zee; el ex funcionario del Departamento de Justicia Paul Pelletier; y el técnico de urgencias Giles Sartin.

La segunda parte destaca la comercialización masiva del opiáceo sintético fentanilo y examina las conexiones entre los fabricantes de medicamentos y la política gubernamental. Mientras esta epidemia silenciosa en Estados Unidos mataba a 40 personas por día, Insys Therapeutics, un advenedizo fabricante de opiáceos de fentanilo, seguía sobornando a los médicos para que lo prescribieran en exceso. El sorprendente vídeo de retiros de ventas y el material promocional hablan de un profundo cinismo entre los empleados de la empresa y un general desprecio por estas nefastas prácticas corporativas. Un complejo plan para defraudar a las compañías de seguros coexistía con tácticas de marketing fraudulentas mientras los legisladores, a menudo financiados por donaciones para campañas electorales de las grandes farmacéuticas, trabajaban para socavar la aplicación de la ley y hacían la vista gorda ante las implicaciones de un complejo sistema que reparte miles de millones de opiáceos en pastillas por todo el país.

Entretejiendo historias de tragedias personales de los técnicos de atención primaria, supervivientes y familiares de víctimas de opioides con la cronología de la codicia corporativa y la malversación, la segunda parte incluye testimonios del ex agente de la DEA Joe Rannazzisi; el ex abogado de la DEA Jonathan Novak; los reporteros del Washington Post Sari Horwitz, Scott Higham y Lenny Bernstein; los fiscales federales auxiliares para Massachusetts David Lazarus, Nathaniel Yeager y Fred Wyshak; el agente especial de Investigaciones de Seguridad Nacional Ed Byrne; el agente residente a cargo de la oficina de la DEA en Lubbock, Will Kimbell; el ex vicepresidente de ventas en Insys, Alec Burlakoff; el ex gerente regional de ventas de Insys, Sunrise Lee; y el traficante de fentanilo Caleb Lanier. Entrelazadas, las historias que cuentan los personajes crean una narrativa mucho más amplia e impactante de corrupción.

Con acceso extraordinario a videos exclusivos, denunciantes e investigadores, El crimen del siglo incluye:

• Imágenes nunca antes vistas de la destitución de Richard Sackler en 2015 por la demanda de Kentucky v. Purdue Pharma

• Vídeos corporativos nunca antes vistos de Purdue Pharma e Insys Therapeutics

• Entrevistas con ex miembros y funcionarios de la DEA, incluido Joe Rannazzisi, que dirigía importantes investigaciones sobre complejas redes farmacéuticas

• Entrevistas exclusivas con exrepresentantes de ventas farmacéuticas que discuten en detalle las prácticas poco éticas e ilegales de sobornar a los médicos y alentarlos a recetar altas dosis de opiáceos. Entre los entrevistados se encuentra el vicepresidente de ventas de Insys, Alec Burlakoff.

• Documentos filtrados del Departamento de Justicia que muestran denuncias detalladas de fraude, conspiración y malversación por parte de Purdue, incluidos contactos indebidos con un oficial médico de la FDA (luego contratado por Purdue) que formaba parte del proceso de aprobación de la FDA para OxyContin.

• Acceso exclusivo al Equipo 10 del Grupo de Trabajo sobre Narcóticos de la DEA en San Diego.

• Acceso exclusivo a los periodistas galardonados de The Washington Post y sus informes de investigación sobre los orígenes y la evolución de la crisis de los opiáceos, que descubre datos asombrosos, como el hecho de que más de cien mil millones de dosis de oxicodona e hidrocodona se repartieron por todo el país entre 2006 y 2014.

HBO Documentary Films presenta una producción de Jigsaw en asociación con The Washington Post y Storied Media Group, escrita y dirigida por Alex Gibney; producida por Alex Gibney, Sarah Dowland y Svetlana Zill; producida por Stacey Offman, Richard Perello, Todd Hoffman y Aaron Fishman. Por parte de HBO: productora senior, Tina Nguyen; productores ejecutivos, Nancy Abraham y Lisa Heller.