El Heavy del Bigotón y el Baturrock

«¡A la mierda!»

(Frase con la que, según diversas fuentes, José Antonio Labordeta cerró de un golpe la puerta del estudio donde colaboraba con el Heavy del Bigotón)

Baturrock iba a ser un álbum doble, con uno de los discos en formato eléctrico (AragON) y el otro acústico (AragOFF); para ello requirió la colaboración de otro mostacho ilustre, José Antonio Labordeta. La prensa de la época llegó a bautizar al cantautor zaragozano como el Ravi Shankar maño ya que auguraba una fructífera colaboración como la que el musico indio tenía con George Harrison. Sin embargo, y pese a alojarse en busca de inspiración y tranquilidad en Villar del Salz (1), un pueblo de lo que entonces nadie llamaba España Vaciada, no hubo espacio suficiente para albergar dos bigotes tan poblados y las diferencias artísticas no tardaron en llegar, finalizando en la furibunda expresión con la que se iniciaba este escrito. Y aunque se hizo alguna foto promocional como la que he encontrado para ilustrar este texto, el Heavy pronto abandonó el proyecto: según el historiador Herman Pociña, tomó la decisión tras intentar comer un adoquín del Pilar y reconocer que nunca podría componer nada tan duro como era ese caramelo de medio kilo.

Nunca sabremos cómo hubiera sonado Baturrock, pero a veces fantasear sobre cómo hubiera sido algo que en nuestra imaginación puede ser maravilloso, es mejor que enfrentarse a una obra real pero decepcionante.

(1) Años después, en 2021, Villar del Salz, o más concretamente su cielo, recibió la certificación de Paraje Starlight que lo catalogaba como un inmejorable lugar para observar las constelaciones. En 1976, durante un breve periodo de tiempo, dos estrellas habían colisionado en el municipio.