El primer medio siglo de George y Martha

Cuando Marshall, que tenía 30 años en 1972 y sólo vivió 50, creó el primero de los siete álbumes que constituyen la serie, puso en él ya todo lo que lo identifica como artista: una gracia elevada, una elegancia abierta, una bondad traviesa, noble e inteligente.

Martha y George encarnan la quintaesencia de la amistad y de una mirada aérea, capaz de sobrevolar las trampas de las apariencias y del orden severo. Esta pareja de hipopótamos siempre resulta liviana, grácil, se diría que es capaz de flotar sobre la página. Podría alegarse que ello se consigue por la desenvoltura del trazo (esa aparente sencillez que implicaba mucho trabajo y talento compositivo), por el gusto con que se mezclan el blanco y los colores, por la limpieza con la que se detallan las bromas, por la eficacia de sus diálogos… Pero es todo eso y es algo que va más allá de eso. Es un espíritu.

En las pequeñas historias de aquel primer álbum y cuantos le siguieron está contenida una lección primorosa sobre la amistad (la risa admirable), un ejercicio completamente infrecuente de presentación auténtica y desembarazada de miserias: “los amigos deben decirse siempre la verdad”, le dice Martha a George cuando descubre que éste vierte la sopa de guisantes cocinada por su amiga en las pantuflas (a George este guiso le horripila, pero teme herir los sentimientos de Martha si lo confiesa). Y acaban compartiendo galletas.

George y Martha se gastan bromas, tienen pequeños enfados y siempre se ayudan. En el cierre del primer álbum vuelve a repetirse la situación. George se cae un día patinando y se rompe uno de sus dos dientes. Desolado, va al dentista, que le pone uno nuevo, de oro. Martha le dice que está muy guapo y apuesto con su nueva dentadura. George se alegra mucho y responde: “Para esto sirven los amigos. Ellos siempre ven el lado bueno y saben cómo animarte”. “Pero también dicen siempre la verdad”, añade Martha con una sonrisa.

La lectura de las historias de George y Martha siempre anima. Todavía no son demasiado conocidos en nuestro país, pero están frescos como una lechuga y sólo han cumplido sus primeras 50 primaveras.

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Autor: James Marshall. Título: George and Martha. The Complete Stories of Two Best Friends. Editorial: Houghton Mifflin. Venta: Todos tus libros y Amazon.