El escritor portugués Gonçalo Tavares ha destacado este miércoles en un diálogo virtual organizado por el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) que la crisis sanitaria ha permitido que «millones de personas que habían olvidado algo esencial hayan podido pensar en la muerte».
En una conversación titulada Actualizar lo importante con la escritora catalana Tina Vallès, quién le ha entrevistado, el también dramaturgo y poeta portugués ha comentado que la pandemia por coronavirus ha puesto a millones de personas frente a la muerte.
Para Tavares, la filosofía clásica revela que «se percibe lo importante cuando te percibes mortal», por lo que la crisis del coronavirus va a «transformar a muchas personas de forma voluntaria, y les animará a tomar decisiones nuevas, porque han estado durante un mes delante de lo importante».
El escritor está incluyendo estas reflexiones en una serie de textos diarios titulados Diario de la peste, que publica originalmente en portugués en el diario Espresso y que se traducen a múltiples idiomas (en el caso del castellano, a cargo de Paula Abramo) y llegan a países como Chile, Italia o Estados Unidos.
Gonçalo Tavares, sin afirmar a ciencia cierta qué transformaciones deparará en la sociedad esta situación, sí que ha percibido ciertos cambios potenciales, como el rechazo al contacto físico y la percepción del resto de personas en la calle como «enemigos» que nos pueden contagiar.
«Somos como náufragos que no nos podemos tocar», ha explicado el narrador, que ha reconocido la importancia de abrazarnos para los seres humanos, y ha destacado que una novedad de esta crisis, a diferencia de otras, es que «no nos podremos tocar».
Otra de esas transformaciones, a ojos de Tavares, ha sido la «democratización del miedo», puesto que «con el terrorismo, teníamos miedo del otro de una forma muy racista, un otro con ciertas características, alguien que podría venir de países árabes». «Ahora el miedo puede venir de cualquier persona», ha recalcado. Ese miedo al contagio y a la muerte es una de esas posibles herencias que legue el coronavirus, algo que Gonçalo Tavares ve perjudicial: «El miedo es un potencial destructor de todo: cuando hay miedo el humano no puede ser mejor y necesariamente será peor».
El coronavirus también ha supuesto para Tavares «un regreso a la tierra», ya que «la gente que ha pasado la cuarentena en el campo lo ha pasado mejor, con más espacio, lo que va a causar un «click» en algunas personas, que decidirán vivir de otro modo, recuperando sonidos e imágenes que no hay en la ciudad».
La política también ha sido otro de los temas de la conversación entre Vallès y Tavares, un aspecto en el que el escritor portugués ha alertado del retroceso que supondría que se extendiese en el tiempo el virus, algo que alargaría «la suspensión de la democracia que implican las medidas restrictivas para contenerlo». «Después de uno o dos años de suspensión de la democracia, es muy difícil volver a la libertad de pensamiento. En esta crisis, se ha instalado la idea de que la contraargumentación al gobierno es algo no deseable, cuando es el principio de la democracia«, ha advertido.
Tavares ha cerrado el diálogo con una previsión poco optimista, puesto que augura que «en los próximos años, va a generarse una violencia basada en pensar en el otro ser humano como alguien que me puede matar».
Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: