El novelista y periodista irlandés John Connolly ha aprendido español durante la pandemia y lo usa para sentenciar que el mal, como el que inunda las páginas de las novelas superventas que protagoniza su famoso detective Charlie Parker, «siempre logra triunfar porque hay gente buena en el mundo».
Connolly participó en el festival VLC Negra, donde acudió a la rueda de prensa con una sonrisa, sentido del humor y su clásico atuendo de chaleco y camisa blanca, aunque lo inesperado ha sido el control sobre el español que ha demostrado, atendiendo él solo a los medios sin ayuda de un traductor.
«Aprendí a hablar español en la pandemia, porque me gusta poder comunicarme con los periodistas y mis lectores», ha matizado.
Respecto a los personajes que protagonizan sus novelas de género negro ambientadas en Estados Unidos y con tintes sobrenaturales (Charlie Parker, Angel y Louis), ha apuntado que en cada libro van evolucionando y ha confesado, entre risas: «Al final tengo que alargar a mis personajes porque necesito escribir para mantener a mi familia».
Además ha señalado que le gusta ver el mundo a través de los ojos de sus personajes, porque con ellos evoluciona como escritor y descubre cosas nuevas que le permiten mantenerse fiel a su público.
Connolly (Dublín, 1968) ha utilizado sus orígenes para explicar que los irlandeses viajaron a Estados Unidos para crear una nueva vida y escapar, y ha destacado que en la literatura también se ha podido apreciar esa huida, porque la ficción norteamericana y el género del detective privado le han permitido realizar un escape imaginativo.
Además ha subrayado que no quería escribir sobre los problemas presentes sino tirar de la imaginación: «Me gusta lo sobrenatural y eso es muy europeo, por eso combino distintas tradiciones con mis raíces».
Cuando se le ha preguntado por el público joven, el irlandés no ha dudado en incluirlo entre sus lectores, y ha destacado que escribe sobre el mal «porque es lo que seduce» a su fiel parroquia de seguidores, esos que han comprado ya más de diez millones de ejemplares de sus novelas en los últimos veinte años.
También ha confesado que, entre su extensa obra -no solo policíaca-, considera su mejor libro He: a novel (2017), basado en el actor Stan Laurel («el flaco» del famoso dúo cómico del Hollywood de los años 20 y 30) y pese a no ser precisamente el más traducido, y lo ha justificado: «Me ha permitido desarrollarme como escritor y establecer un equilibrio entre los objetivos comerciales que hay en la industria y mis objetivos personales».
Connolly ha finalizado el encuentro confesando que pese a que siempre habla sobre el mal, para él sus mayores miedos son sufrir un cáncer como su padre y padecer una enfermedad relacionada con la demencia, como han sufrido muchos miembros de su familia.
El mal triunfa porque lo buscamos fuera. No conozco a un sólo santo que no se creyera más malo que un demonio.