Hace unas semanas dábamos un repaso a la música en español de hace 40 años, y ahora vamos a darnos otro paseo por la calle del recuerdo con los éxitos en inglés. Al igual que la anterior, está ordenada por aparición cronológica de los singles durante esos meses, aunque en el caso de algunos artistas se añade qué otras canciones lanzaron ese año. Esta lista incluye solamente 40 temas, con enlace a YouTube en el título, pero una recopilación más amplia, de más de doscientas, puede encontrarse aquí.
1 – U2 — New Year’s Day / Two Hearts Beat As One
Primer gran éxito de U2 fuera de su Irlanda natal. Su tono épico y su vídeo con caballos entre la nieve sirven muy bien para despertarte tras Nocheviejas movidas. Sin embargo, su inspiración es el movimiento político polaco Solidaridad, lo cual es extremadamente ochentero. Más sobre esta canción, aquí.
2 – Michael Jackson — Billie Jean / Beat It / Wanna Be Startin’ Something / Pretty Young Thing / Say Say Say / Thriller
El 2 de enero de 1983 Michael Jackson lanzó el single «Billie Jean», y el resto del año fue un no parar de pelotazos procedentes del LP Thriller: «Beat It» el 14 de febrero, «Wanna Be Starting Something» el 8 de mayo, «Pretty Young Thing» el 12 de septiembre, «Say Say Say» en dueto con Paul McCartney el 3 de octubre y finalmente «Thriller», con su famosísimo vídeo, el 5 de noviembre. Se piense lo que se quiera de Jackson a raíz de las acusaciones de pederastia en su contra, fue sin duda el campeón del año, es una figura señera en la historia de la música, y es muy difícil escoger una sola de estas. A pesar de lo espectacular del vídeo de «Thriller», seguramente a la que merece la pena echar un vistazo extra es a «Billie Jean» y su letra en la que un tío rechaza aceptar que el crío que ha tenido uno de sus ligues es suyo. Aquí les cuento más por extenso lo de este tema y la canción respuesta que mereció.
3 – Paul Young — Love of the Common People / Wherever I Lay My Hat
Las voces blancas cantando soul negro (estilo a veces llamado blue-eyed soul) tuvieron bastante éxito a finales del siglo XX, y el inglés Paul Young fue uno de sus representantes más afortunados, con dos versiones de temas de los 60 («Love of the Common People», de los Four Preps, y «Wherever I Lay My Hat», de Marvin Gaye) que superaron en ventas a los originales.
4 – Eddy Grant — Electric Avenue
Más conocido más adelante en la misma década con aquello del «Yoana guimijou», el guyanés Edmond Grant fue uno de los pioneros a la hora de llevar muchos ritmos afrocaribeños a las listas de todo el mundo, especialmente mezclados con música electrónica, latina o rock. Esta Avenida Eléctrica, nominada al Grammy, es uno de esos ejemplos, empaquetando en una sola canción el empuje a la vida que puede darte la música junto con protestas sociales por brutalidad policial.
5 – Eurythmics — Sweet Dreams / Who’s That Girl / Right By Your Side
El inglés Dave Stewart y la escocesa Annie Lennox, pareja dentro y fuera de los escenarios, rompieron la segunda parte de su binomio nada más empezar los 80 pero no la primera, y tras cambiarse el nombre (antes eran The Tourists) empezaron por fin a encontrar el éxito que se les había escapado hasta entonces. El 83 fue su año de despegue y «Sweet Dreams» el momento donde los sintetizadores de Stewart y la imagen andrógina y futurista de Lennox conectaron con el público de la MTV.
6 – Tears For Fears — Change / Pale Shelter
Curt Smith y Roland Orzabal (apellido vasco, sí) a menudo salen posando en sus fotos promocionales mirando en dirección contraria, como si estuvieran cabreados el uno con el otro, pero durante los 80 tuvieron una colección de éxitos nada desdeñable con su pop-rock de humor cambiante e intenso. «Change» fue el segundo de ellos.
7 – Mike Oldfield – Moonlight Shadow / Shadow on the Wall
El multiinstrumentista de Reading no goza en el Reino Unido del seguimiento que tiene en otros países, sobre todo en el resto de Europa. Aparte de su labor de niño prodigio con el meritorio álbum Tubular Bells, sobre el que se construyó el imperio Virgin, luego se lo relegó a rock-popero ligero y prescindible, que a menudo fichaba a diferentes cantantes de ambos sexos para grabar sus composiciones. Dos muestras típicas son estos dos temas, cantados por Maggie Reilly y Roger Chapman respectivamente.
8 – Bonnie Tyler — Total Eclipse of the Heart / Have You Ever Seen the Rain
El épico baladón de Jim Steinman encontró su intérprete perfecto en la voz medio ronca medio cascada de la Tigresa de Gales, con vídeo en el mismo tono realizado por el mismo director de Los inmortales (Highlander). El karaoke se inventó y patentó justo en este año, y varias generaciones de borrachos y borrachas más o menos angloparlantes llevan destrozándola desde entonces.
9 – Bananarama — Na na hey hey / Cruel Summer
Tras un par de años haciendo coros con los Fun Boy Three y antes de quedar atrapadas en las redes de los multiproductores Stock, Aitken y Waterman, que hacían sonar igual a todos sus artistas, este trío de chicas consiguieron cuatro éxitos pop entre el 83 y el 84 («Robert De Niro’s Waiting» y «Rough Justice» son los otros dos) que aún merecen recordarse.
10 – New Order — Blue Monday
Nacidos de las cenizas de los post-punk Joy Division, New Order son una leyenda de la música electrónica alternativa, y este tema en concreto, que también marca el paso de la música disco de los 70 a la dance/house de los 80 y 90, tiene el récord, que ya será eterno, de ser el maxisingle (preguntad a vuestros papis) más vendido de todos los tiempos. La mejor versión de la canción es la remezcla de 1988, pero venga, va, la ponemos ya.
11 – David Bowie — Let’s Dance / China Girl / Modern Love
La leyenda de Bowie se basa sobre todo en su época de los 60 y 70, pero durante la década siguiente demostró en varias ocasiones que podía ochentar los 80 tan bien como cualquier ochentero. Con «Let’s Dance» se pasó al rubio platino, cantando en un bar perdido en Australia, rodeado de descendientes de pobladores nativos y de rudos curritos locales que disimulaban sus asombradas miradas como podían.
12 – Duran Duran — Is There Something I Should Know?
Fue una frase de una canción de Duran Duran la que cristalizó el apelativo de los New Romantics británicos de los 80, y este su octavo single fue el primero que llegó al número 1. Hacían pop eficaz con toques guitarreros, pero una buena parte de su éxito, es justo decirlo, la debían a su atractivo físico, a su estilizada imagen y a sus cuidados vídeos llenos de chicas guapas y paraísos exóticos.
13 – Spandau Ballet — True / Gold
Hablando de New Romantics, la pelea está dura sobre quiénes eran más fotogénicos, si los Duran o los Spandau. Tras un buen primer single («To Cut a Long Story Short») y otro éxito muy funky, cañero y estimable un par de años antes («I Don’t Need This Pressure On»), sus cinco singles siguientes habían sido bastante decepcionantes, pero con la pareja «True» y «Gold» lograron dos canciones que son de lo mejor de la década en su estilo: pop sereno y bien trajeado, casi de galán de bolos nocturnos.
14 – Elton John — I Guess That’s Why They Call It the Blues / I’m Still Standing
Un tema recurrente de esta lista será «músicos cuya época ochentera es a menudo ninguneada por la crítica en comparación con su brillantez anterior, pero que produjeron en esta década varios clásicos». Reginald Dwight es sin duda el paradigma en este sentido: tras unos años en declive, de repente en 1983 se sacó de la funda de las gafas este par de grandes temas, uno lento y uno rápido, uno de sentarse al piano y otro de sacarlo en público a una soleada playa de la Riviera francesa, que pueden añadirse a su disco múltiple de grandes éxitos de toda su carrera sin ningún desdoro.
15 – The Police — Every Breath You Take / Wrapped Around Your Finger / Synchronicity II / King of Pain
1983 fue el año en el que The Police se separaron y Sting comenzó su carrera en solitario. Su disco de despedida, Synchronicity, contiene estas cuatro joyas, la más conocida de las cuales es «Every Breath You Take», una desgarrada balada que muchos toman como prueba de amor hacia la persona deseada (y que aún se pone en muchas bodas), pero que es más bien lo contrario, con una letra más propia de un ex despechado y acosador o de una pareja controladora, pendiente de «cada vez que respiras».
16 – Rod Stewart — Baby Jane / Sweet Surrender
Otro que tal baila(ba). Después de su época disco con aquel «Da Ya Think I’m Sexy?» se pasó cinco años un tanto meh hasta que volvió al número 1 (su último) con esta canción en la que la chica del título lo abandona para escalar en la sociedad, pero bueno, así aprende uno, y además, si la chica era capaz de hacerle eso, es que igual tampoco merecía tanto la pena. Prubín Rod.
17 – Electric Light Orchestra — Rock ‘n’ roll Is King / Four Little Diamonds
La segunda mitad de los 70 y la primera de los 80 estaba obsesionada con el rock de los 50 y 60 (véanse Grease, Regreso al futuro, American Graffiti y otras películas), con el que la generación siguiente había crecido, y de resultas de la cantidad de bandas que aún se ganaban la vida ciñéndose a ese estilo musical se llegó a acuñar la etiqueta de fifties revival para referirse a estos nuevos rocanroleros. La ELO no solo tocaban ese palo, sino que su abanico de mezcolanzas de rock era más amplio, pero este pastiche que crearon puede acompañar a cualquier clásico original sin problema.
18 – Donna Summer — She Works Hard For the Money
Este es el último gran éxito, con nominación al Grammy incluida, en la carrera de la gran diosa de la música disco, estilo que para entonces ya solo producía lo que después se etiquetaría como post-disco. Vale, en 1989 Summer todavía tendría «This Time I Know It’s For Real», que también está muy bien, pero esta canción es mejor, y desde su estreno ha funcionado siempre muy bien como himno para la mujer currante, donde lo de «trabajar duro para ganar dinero» no se usa como eufemismo, sino como verdad tal cual.
19 – Iron Maiden — The Trooper
Para muchos la mejor canción de la, para muchos, mejor banda de heavy metal, es la historia de la famosa Carga de la Brigada Ligera (Crimea, 1854) hecha rock épico al galope, nunca mejor dicho. El heavy nunca suele asomarse mucho por las listas generales de ventas de sencillos (en LPs es otra historia), pero en la primera mitad de los 80 lo consiguió más que nunca, y con esta canción en concreto, entre el orgullo patrio y unos arreglos menos barrocos de lo habitual, lograron uno de los mayores éxitos del género.
20 – Depeche Mode — Everything Counts
Nunca jamás han tenido los Depeche un número 1 en el Reino Unido o Estados Unidos, pero siempre han sido una de las bandas más respetadas de su tiempo, dando además categoría al synth pop (y un tono a veces más oscuro a sus letras, aunque no carente de esperanza), tras unos inicios en los que parecían unos niños pijos con un Casio de juguete. «Everything Counts» es una de las canciones con las que lo petan en sus conciertos, y su versión en directo publicada años más tarde es una gozada.
21 – ZZ Top — Sharp Dressed Man / Gimme All your Lovin’ / TV Dinners
Ante el horror de sus seguidores de toda la vida y el jolgorio de las nuevas generaciones, esta banda de peligroso bareto texano consiguió auparse a lo más repetido en la MTV con sus barbonas sin pelar, su rock amante de los coches y las chicas, y su esquema de dos estrofas + machacón solo guitarrero de salida. Estos tres singles de su disco Eliminator los pusieron en el mapa global tras catorce años de aguantar botellas de cerveza volando por los garitos, y de repente hasta las nenas de dieciséis se les acercaban.
22 – UB40 — Red Red Wine / Many Rivers to Cross
Los hermanos Ali, Robin y Duncan Campbell eran hijos de un cantante folk escocés, y más blancos que los acantilados de Dover, pero su amor por el reggae que crecieron oyendo en su Birmingham natal los protege contra cualquier acusación de apropiación cultural. Son seguramente la banda más exitosa de su género musical, entre composiciones propias, regrabaciones de clásicos de este estilo y adaptaciones de otros temas, desde Elvis Presley hasta canciones de misa. Esta oda al vino tinto no es exactamente «a mí me gusta el pimpiribín pimpín», sino algo más sereno y de borrachuza tranqui.
23 – Ryan Paris — Dolce Vita
Ah, el italodisco, tan amado y denostado como unos macarrones con chorizo. Cómo una nación con un pasado musical tan sublime que es su idioma el que se usa internacionalmente para nombrar los tempos (adagio, allegro, presto, etc) llegó a producir esta cosa tan indescriptible es un misterio por resolver. Este tema de Fabio Roscioli es uno de sus mejores ejemplos, tanto que podría pasar por pop anglosajón si te despistas un poco.
24 – Lionel Richie — All Night Long
En 1981 Richie empezó a grabar en solitario tras ser hasta entonces el vocalista principal de los Commodores, y fue capaz de pasar de las armonías en grupo de los 60 y 70 a un rhythm and blues más comercial que le trajo cinco números uno en los 80 (y lo llevó a ser quien inspiró el nombre de Leo Messi, no es coña). Uno de ellos es este «All night Long (All Night)», donde hasta le mete toques caribeños y un trozo de letra en idioma africano inventado, y a cuyos compases Richie dice que se han engendrado miles de bebés.
25 – Culture Club — Karma Chameleon
El single más vendido del año 1983 en el Reino Unido. Es uno de esos casos en los que la canción más popular de un grupo no va mucho con el resto de su sonido típico, y la acaban aborreciendo en algún momento. Boy George, el carismático vocalista de la banda, se emperró con que quería grabarla a toda costa, los demás cedieron y fue un gran exitazo, de los que sale en todos los recopilatorios de la época. Con su vídeo ambientado en un barco por el Mississippi en 1870 (rodado en el Támesis en realidad), es toda una fiesta de disfraces en la que George está más en su salsa que nunca.
26 – Cyndi Lauper – Girls Just Want to Have Fun
Este single se puso a la venta solo un día antes que el «Holiday» de Madonna, y durante un tiempo se pensó que, en este inesperado duelo de las dos americanas alocadas y de ropaje estrafalario, la más exitosa de las dos sería Cyndi. Al final no resultó ser así, pero desde luego que la Lauper le llevó la delantera a la Ambición Rubia durante un tiempo. Regrabada en los 90 con un tempo un poco más sereno, como de after tras demasiadas noches locas, sigue siendo uno de los temas más ochenteros que escucharse pueda.
27 – Madonna – Burning Up / Holiday / Lucky Star
Mientras preparaba su asalto a la inmortalidad con «Like a Virgin» al año siguiente, Madonna aún tuvo tiempo de sacarle cinco singles a su primer disco. «Lucky Star» fue el que más alto llegó en Estados Unidos (puesto 4), pero «Holiday» es el que más ha perdurado en el tiempo, reflejando parte de lo que le pasaría a la señorita Ciccone durante toda su carrera: puede dar todas las vueltas y revueltas temáticas que quiera en su música, pero siempre acabará volviendo al sentimiento básico del simple gozo de un día de holiday donde uno pueda celebrate bailando con su música favorita. It would be so nice.
28 – Nik Kershaw — I Won’t Let the Sun Go Down On Me
La mayoría de esta lista nos está saliendo con nombres muy conocidos y de larga carrera. Quede aquí el señor Kershaw como ejemplo de lo más normal que ocurre, que es que un artista dure en el éxito unos pocos años como mucho y después o lo deja del todo o se arrastra como puede por los escenarios sin casi atención. Esta pegadiza canción se estrenó en septiembre del 83, pero no triunfó hasta el año siguiente.
29 – Pat Benatar – Love Is a Battlefield
Ejemplo de artista que, en una carrera sin grandes éxitos ni grandes bajones, consigue al menos un pelotazo de los que le arreglan a uno la vida años más tarde cuando se la piden para usarla como banda sonora en todo tipo de retro-proyectos. Es un tema de pop-rock épico, sobre el amor como lucha, como fuente de dolor, como campo de batalla, en suma.
30 – Billy Joel — Uptown Girl
Como ya se dijo antes, en los 80 de vez en cuando se echaba la vista atrás y se copiaba el estilo de dos décadas antes, recordándoselo a los mayores y presentándoselo a los jóvenes. Este retro-éxito duduá de Billy Joel, ayudado por su vídeo de «mecánico de barrio se liga a la rubia del Rolls» (que fue verdad: Joel se casó con Christine Brinkley, la supermodelo del vídeo) es uno de los mejores ejemplos, y habría sido una de las mejores canciones de 1963 también.
31 – Yes — Owner of a Lonely Heart
El rock progresivo no se da mucho a los singles, debido a su preferencia por temas de bastantes minutos de duración, y es un estilo muy criticado en algunos círculos, tratado como música para exhibicionistas de «mira qué solos más largos me hago». Sin embargo, con esta canción Yes se marcaron un pedacito perfecto de pop-rock estupendamente adecuado para las radiofórmulas.
32 – Frankie Goes To Hollywood — Relax
«Frankie Says Relax», decía la mítica camiseta. Esta oda al orgasmo masculino («when you wanna cum», «cuando quieras correrte»), proveniente de una banda con dos homosexuales no declarados (porque no les hacía falta declararlo, no porque tuvieran cualquier problema con ello), es una de las composiciones más importantes de los 80. No solo por su temática y su descaro al tratarlo, sino por la extraordinaria producción electrónica de Trevor Horn, que cogió una prometedora cancioncilla de tono sado-funky (véase aquí la primera versión) y la transformó en un temazo que arrasó las pistas de baile. Hoy en día esos arreglos pueden parecer no demasiado difíciles, pero de aquella eran de gran complejidad técnica. Añádase a esto la polémica de la letra, el desmadre del vídeo, la censura en los medios y el peligrito de lo prohibido, y el éxito fue absoluto.
33 – Grandmaster Flash & Melle Mel — White Lines
El rap y el hip hop estaban aún horneándose en las cocinas de Nueva York y Chicago, y uno de sus primeros éxitos internacionales fue esta canción cuyo comentario social sobre el uso de drogas era tan irónico (a eso se refieren las «líneas blancas» del título) que se acabó incluyendo un rotundo «don’t do it!» en la letra para dejar el mensaje claro. Como era típico del hip hop, se usaron partes de otras canciones anteriores para crear esta, pero lo que tiene un pase durante un sarao de barrio no cuela cuando el resultado vende millones, y el sello discográfico se declaró en bancarrota antes que pagar los 600.000 dólares a que los condenaron.
34 – The Smiths — This Charming Man
Se nos queda pequeño el hueco para el indie y lo alternativo, pero no podemos dejar de mencionar a los Smiths en el año de su debut. Con la guitarra jangle pop de Johnny Marr y la voz de hombretón siempre perdido y confuso de Steve Morrissey, llegaron a un público que no buscaba necesariamente alegría y diversión, sino reconocer la banda sonora de sus propios pensamientos, dudas e incertidumbres en una década que por todo el brilli-brilli de las fotos, podía ser bastante gris y deprimente al salir del garito. No eran las letras de un macho persiguiendo hembras, sino de un ser vulnerable, de sexualidad no binaria, con alegrías y tristezas de compleja exploración y de vocabulario a veces «con palabras de más de diez letras», como decía el propio Morrissey. Quizá por eso hoy en día están teniendo mejor predicamento (aparte de las excentricidades de Morrissey) que en los propios 80.
35 – Billy Idol – Rebel Yell
En el cole lo llamaban «idle» (vago) pero él lo reconvirtió en «idol» (ídolo), que se pronuncian casi igual. William Broad sabe poner el mejor careto de desprecio chuleta de la historia de la música, pero por toda su pose de punkarra de vida salvaje (que en parte ha cumplido), luego su música resulta bastante pegadiza y hasta popera dentro del rock duro, a pesar de todo el cuero, el pelopincho y el aire macarra. Sacando inspiración de una marca de whisky, que a su vez lo sacó del grito de guerra del bando sudista en la Guerra de Secesión norteamericana, es un tema que resume bastante bien la música de este londinense con pasaporte estadounidense.
36 – Rufus and Chaka Khan – Ain’t Nobody
Rufus era la banda de funk donde Yvette Marie Stevens cantaba, pero su voz, su voluptuosidad y su melena indomable pronto la llevaron a ser el sello visual del grupo, así que había que colocar su nombre en letras propias. Su otro nombre, Chaka Adunne Aduffe Hodarhi Karifi, se lo dieron en el instituto a los 13 años, y aunque lo de Chaka significa «pantera», no tiene nada que ver con los Black Panthers de los 70. También a gusto en los terrenos del soul, disco y rhythm and blues, fue uno de los ídolos de Whitney Houston.
37 – Tina Turner — Let’s Stay Together
Anna Mae Bullock es una de las jefas de todos los tiempos, y su transformación desde vocalista soul maltratada por su marido y pareja artística a diva pop-rock capaz de destrozar a gente veinte (y luego treinta, y luego cuarenta) años más joven sobre el escenario es auténticamente milagrosa. Su disco Private Dancer produjo siete singles nada menos (el primero de los cuales es este), y ese LP sigue siendo hoy en día el modelo ideal de cómo reinventarse musicalmente con apoteósico éxito.
38 – The Thompson Twins — Hold Me Now
Siete LPs grabó este grupo británico, aunque todo lo bueno suyo está concentrado en uno solo, el cuarto, que contiene este «Hold Me Now», además de «Doctor! Doctor!» y «You Take Me Up», lanzados como sencillos al año siguiente. Lo anterior y lo posterior es bastante olvidable, pero estos tres les quedaron de maravilla. Se les acabó toda la poción mágica en el mismo frasco.
39 – The Flying Pickets — Only You
En términos cronológicos se pueden analizar tendencias, estilos, influencias y demás movimientos de amplio alcance, pero a veces hay momentos musicales que ocurren sin gran relación o explicación con el resto de lo que tienen alrededor, cual florecilla inesperada en medio de una roca. The Flying Pickets era un grupo de actores que se juntaron para cantar a cappella en una obra marginal en 1981, y cuyo nombre no era un homenaje al gran soulman Wilson Pickett, sino una referencia a los piquetes de las huelgas mineras de los años 70. Viendo que no se les daba del todo mal, y que podían actuar por los garitos ahorrando una pasta gansa en instrumentos, se les ocurrió hacer versiones solo con voces armonizadas de canciones pop, y uno de ellos fue este «Only You», un estupendo tema electropop de Yazoo que había llegado al número 2 el año antes. Bueno, pues su versión la superó, llegando a las cinco semanas en el número 1, incluyendo la lucrativa época navideña, imponiéndose a toda la maquinaria discográfica especializada. El truco les coló una vez más al año siguiente con «When You’re Young and In Love», un tema de 1967, pero desde entonces la novedad desapareció.
40 – Van Halen – Jump
En Estados Unidos se le tiene verdadera reverencia a Van Halen, tanto a su guitarrista Eddie Ídem como a su vocalista David Lee Roth, que de tan energético, melenudo y saltarín que era por los escenarios parecía más una parodia de los excesos del rock duro que otra cosa (aunque luego era tan juerguista como el que más). Este tema en concreto, ayudado por unos teclados que suavizaban el sonido para las masas, tuvo un gran éxito internacional.
Bonus track – Nena – 99 Luftballoons
A caballo entre 1983 y 1984, dependiendo del idioma, les cuento más sobre ella aquí.
Gente que se ha quedado fuera esta vez: Marvin Gaye (con el último single de su carrera), Dire Straits, Eric Clapton, Van Morrison, Clannad, Irene Cara, Orchestral Manoeuvres In The Dark, The Bee Gees, Diana Ross, Aretha Franklin (los 80 no fueron lo suyo, la verdad), Wham!, Motörhead, Dolly Parton, Genesis, Kool And The Gang, Gloria Gaynor y muchos más. La lista más larga, otra vez, aquí.
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