La última máscara de lo salvaje

Así es cómo Orellana parte con un puñado de valientes en lo que en teoría va a ser una misión breve y termina devorado por las fauces de lo sublime cuando se dan cuenta de que no es posible remontar el río hacia arriba. Una exploración de quince días se convertirá así en un periplo de más de siete meses en el que la única garantía de retorno es dejarse llevar hacia adelante por las indomables aguas y sobrevivir en el intento. En este viaje, todos los elementos pertenecientes a lo Salvaje con los que estos hombres de Occidente ya estaban familiarizados desfilan ante sus ojos para mostrarles una nueva cara del misterio, más cruda y brutal si cabe; el corazón más profundo y lisérgico de la selva, metáfora de la capa más intrincada de la conciencia humana. La existencia despojándose de la última máscara. O, tal vez, de la primera.

Y en esta travesía no solo está en juego el bien más precioso, que es la vida, sino la cordura. Con una narrativa sencilla, pero profunda, como la esencia de esta historia, en este cómic van desgranándose junto a la angustia creciente de sus protagonistas las claves de esta supervivencia casi mágica, casi fortuita, casi providencial. Orellana se revela como un líder que sabe tomar las decisiones adecuadas en los momentos más extremos sin dejar que su psique se vea mermada por la excepcional magnitud de la hazaña que se está acometiendo.

En este contexto gobernado por los límites, el mito despierta, se despereza y grita desde el corazón de los hombres para espantar a la locura. En esta exhibición interminable de los misterios de la Naturaleza en su estado más descarnado y primigenio, poner nombres conocidos a lo que es absolutamente desconocido, a lo que sitúa al individuo en contacto con la muerte, como es el ataque de las feroces mujeres que lanzan flechas, crea espacios en el alma para la esperanza e incluso para prepararse para lo peor. Por eso Orellana llamó a estas guerreras amazonas y posteriormente bautizó al río con el mismo nombre. Si la caricia de la muerte tiene un nombre conocido, el tránsito es psicológicamente más llevadero.

Orellana en el río de las amazonas, editado por Cascaborra, es la historia narrada en viñetas de un grupo de hombres que sin pretenderlo se ven abocados a asimilar lo sublime y a domesticar ese vértigo infinito que produce para poder contarlo después. Es el relato de un grupo de supervivientes que se vieron impelidos a experimentar una peripecia digna del mismísimo Ulises. Es un cómic que, aunque lleva muy poco tiempo entre nosotros, parece que siempre ha estado ahí, al igual que los sonidos incognoscibles de la selva amazónica cuyos ecos retumban en lo más profundo de nuestro ser.

La historia de Orellana necesitaba ser contada porque es el relato fascinante de cómo la sangre corre por nuestras venas, una metáfora del hombre descubriéndose a sí mismo en el seno de lo extraño, una aventura sin parangón, y es de agradecer que la gesta haya sido llevada a cabo tan maravillosamente por Álber Vázquez al teclado y Sergio García a los pinceles. Gracias a los dos por estar a la altura de las circunstancias.

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Autor: Álber Vázquez. Ilustraciones: Sergio García.  Título: Orellana en el río de las amazonas. Editorial: Cascaborra. Venta: Todostuslibros.