Las 10 mejores películas de Greta Garbo

La suya fue una carrera fulgurante que apenas duró quince años. Apareció a mediados de la década de los 20, desde su Suecia natal, siendo poco más que una adolescente y trabajando con algunos de los maestros europeos del cine mudo, como Victor Sjöstrom o Georg Wilhelm Pabst. Pronto se asentó como una de las mayores estrellas del celuloide norteamericano de la mano del que fue su director predilecto, Clarence Brown. Llegado el cine sonoro y después de prestar su rostro a icónicos personajes como la Reina Cristina de Suecia o Ana Karenina —en dos ocasiones—, Greta Garbo todavía tuvo tiempo para colaborar con George Cukor y Ernst Lubitsch, dos de los primeros maestros de la época dorada de Hollywood. Ella, sin embargo, se retiró de la interpretación al entrar la década de los 40, con apenas 35 años de edad. Vivió 50 más, pero su rostro quedó grabado en el imaginario global en aquel vetusto blanco y negro, fría e inmortal.