Las 10 mejores películas de Nicholas Ray

La suya fue una carrera que duró apenas 15 años: los extendidos desde su debut en la dirección con la fabulosa Los amantes de la noche, en 1948, y la realización, en 1963, de 55 días en Pekín, ya inmerso en una decadencia marcada por el alcoholismo, la ludopatía y la fuerte depresión que sufrió tras el fallecimiento de James Dean, la estrella de su película más popular, Rebelde sin causa, apenas una semana antes de que ésta llegase a las salas. Pero tuvo tiempo para construir una filmografía muy particular dentro del ecosistema de la era dorada de Hollywood: trabajó con muchas de las grandes estrellas de su tiempo —Humphrey Bogart, Robert Taylor, Joan Crawford, Maureen O’Hara, John Wayne, Joan Fontaine, James Mason, Robert Mitchum, Cyd Charisse o su esposa Gloria Grahame, por citar a algunos— pero mantuvo cierta distancia con las formas del cine institucional estadounidense. Reivindicado en los 60 y 70 por la nueva ola de cineastas franceses —y, en general, europeos, no en vano aparecerá en dos de las primeras películas del alemán Wim Wenders—, Nicholas Ray pasará a la posteridad como uno de los pioneros de una nueva forma de comprender el cine más allá de las pautas de los grandes estudios, aplicando una poética personal muy definida y subvirtiendo los códigos de géneros tan funcionales en los años 50 como el western o el thriller policíaco. Hoy, en Zenda, recordamos diez de las mejores películas que dirigió.