Quien esto escribe reconoce su debilidad por la editorial Pasado & Presente y el trabajo de Gonzalo Pontón. Aunque no son muchos los años transcurridos desde que reiniciaron la andadura, la seguidilla de títulos que han sido capaces de poner en las librerías, a cual más interesante, resulta asombrosa y ejemplar. Cabe recordar, por ejemplo, en los inicios, aquel Por el bien del Imperio, del profesor Fontana, que tantas ediciones mereció –algunos compramos casi una entera, de tanto como lo regalamos a los amigos–, o, más reciente, Cervantes, la figura en el tapiz, de Jorge García López, que sin duda está entre lo mejor de lo mejor que se ha publicado sobre el autor del Quijote en este año en el que el centenario ha producido ciertamente sobreabundancia.
Así que cuando esta editorial anuncia una salida, nos encuentra predispuestos, incluso si la cosa pinta algo rara, con autora desconocida y un título extraño: Las brujas de la noche. En defensa de la Madre Rusia. Una vez más, la confianza quedará justificada, porque se trata de una obra muy bien ejecutada, cuyo interés, en principio limitado, se expande con la propia lectura.
El núcleo del libro es la historia de un batallón aéreo femenino que se formó en la Unión Soviética en las fechas de la batalla de Stalingrado. Más allá de la singularidad del tema –pocas mujeres participaron directamente en la Segunda Guerra Mundial, y menos de aviadoras– la cosa no daría mucho de sí de no mediar la inspiración de la autora, que con alto tono narrativo y habilidad de cronista convierte un libro de historia menor en un relato sugestivo, donde el análisis social e incluso la reflexión política hacen de pegamento al inventario de vivencias individuales. Los personajes no sólo se nos muestran en ese a menudo efímero periodo donde quedan iluminados por los focos de la historia; la autora se esfuerza en que los conozcamos de antes, en su entorno familiar y de amistades, y que sigamos en la medida de lo posible con ellos incluso después de su muerte en combate.
Tuvimos ocasión de coincidir con Lyuba Vinogradova en su visita promocional a España y conocer de primera mano detalles de la gestación de la obra, que en este caso son especialmente reveladores. Como ella misma cuenta en el prefacio, no supo de la historia de las aviadoras hasta hace relativamente poco tiempo, en 2009. A partir de ese momento, desarrolló sus pesquisas en varias direcciones: en primer lugar, los archivos del ministerio de Defensa ruso, donde pudo acceder a los registros de las operaciones militares y a notas de los combatientes y comisarios políticos. Después, los testigos, y ahí tuvo la inmensa fortuna de encontrar a una piloto de caza que le puso en la pista de más supervivientes. Finalmente, el trabajo de campo le llevó hasta Ucrania, a la búsqueda de recuerdos y tumbas que nunca fueron marcadas.
El resultado, quizá por la propia vocación de quien lo escribe, es más que un libro de historia, sin dejar por ello de serlo. El que guste de la lectura bélica disfrutará, pero además, espigando entre el texto, se encuentran muchos otros fragmentos que, sin pasar apenas de esbozos, cumplirán un papel fundamental en el aprecio final del lector. La evacuación de Moscú, por ejemplo, que ocupa no más de dos páginas, con inevitables resonancias de Guerra y Paz, y uno se lamenta de que la autora no se estirara aquí un poco más. O los muchos detalles de la vida de las aviadoras, casi adolescentes, cuyo candor e idealismo consigue superponerse al rigor extremo de la situación. Y otros hilos sueltos –el rol de los servicios secretos soviéticos, las acusaciones de traición– quedarán ahí, quizá aguardando una segunda entrega. Para el final, y a tono con el aire intimista de todo el libro, queda la historia del poema Espérame, canto y símbolo de la generación.
El libro se lee como la novela que no es, y esto, que se dice en tantas ocasiones, aquí es especialmente constatable. Narrar la guerra a través de las personas tiene infinitos riesgos, pero cuando las dosis han sido bien pesadas y medidas, y el guiso convenientemente sazonado, el premio está en la mano.
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Título: Las brujas de la noche. Autor: Lyuba Vinogradova. Editorial: Pasado & Presente. Edición: Las Brujas De La Noche
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