Este breve ensayo de la escritora británica Zadie Smith, tal vez más conocida en su faceta de novelista, fue escrito durante los primeros meses de confinamiento. Pensé como lectora prejuiciosa que para escribir sobre ello sería necesario reposo y cierta distancia, pero estaba equivocada. Zadie Smith consigue condensar en este breve libro de poco más de cien páginas mucha sabiduría y reflexión, además de entretenernos y recordarnos muchos hechos cotidianos que se convirtieron en extraordinarios durante esos complicados meses.
La cita con la que Zadie Smith arranca el libro es muy significativa, y justifica —si es que hiciera falta hacerlo— el breve lapso que ha pasado desde los hechos que narra hasta la publicación del libro. La cita es de Las meditaciones, de Marco Aurelio, y dice: “¡Cómo se pone de manifiesto el hecho de que no existe otra situación tan adecuada para filosofar como aquella en la que ahora te hallas!”.
La autora arranca con un prólogo en el que explica que este libro está compuesto por ensayos personales, breves y modestos, y que tuvo la necesidad de buscar asideros emocionales, que encontró en el libro de Marco Aurelio, con dos indicaciones fundamentales: “Hablar contigo mismo a veces ayuda, y escribir significa que alguien puede oírte”. Eso es lo que hacemos al leer Contemplaciones: escuchar a esta gran escritora y hablar con nosotros mismos, porque su libro invita a la reflexión y a la escucha.
La ciudad capta gran parte de la atención del libro, y de ella dice que “existe un habitante ideal de la ciudad, que da la impresión de no compadecerse de sí mismo, que sabe exactamente cuánto rato hablar con alguien por la calle, que crea comunidad sin sentimentalismos exagerados y sin necesidad de mencionar siquiera la palabra comunidad”. Podría ser Londres, Nueva York, casi cualquier ciudad de hoy en día. Por eso este libro llega tan adentro. Da lo mismo dónde ocurran los hechos, todos nos hemos sentido de una manera muy parecida. ¿Quién no ha sentido lo que Zadie Smith narra en estas líneas? “Cuesta mucho abandonar los viejos hábitos. Me resulta imposible librarme de la necesidad de hacer algo, de crear algo, de sentir que este nuevo espacio de tiempo no se ha desperdiciado”.
En este libro la ternura y la intimidad conviven junto a la indignación y la ironía. Es un libro sensible e inteligente, y al lector le va a pasar leyéndolo lo que a la propia escritora cuenta que le ocurre: “Me consuela descubrir que no soy la única persona de este mundo que no tiene ni idea de cuál es el sentido de la vida, ni de qué podemos hacer con este tiempo muerto, salvo llenarlo”. Smith lo ha llenado con palabras y lecturas, y todos nos sentimos más consolados leyéndola. Además, me ha llevado a otro libro, como hacen los buenos escritores, a Las meditaciones, de Marco Aurelio.
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Autora: Zadie Smith. Título: Contemplaciones. Editorial: Salamandra. Venta: Todostuslibros y Amazon
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