El Black Friday es un pifostio comercial apabullante. Un festín de la sociedad consumista marcado en rojo, como Halloween, la campaña navideña –no confundir con la Navidad– o las rebajas de enero.
Este 25 de noviembre podemos fundir la tarjeta de crédito como si no hubiera mañana. Pero también podemos convertir el viernes, y a partir de ahora cualquier viernes, en el día negro de la semana.
Podemos celebrar un black friday del noir, un viernes negro, policiaco y criminal, quemando libros como Pepe Carvalho. Tirándolos a la piscina, como Umbral. O casi mejor salvándolos de la hoguera, como hizo Cervantes con Amadís de Gaula y Tirant lo Blanc en el Quijote.
Para abrir juego, rescato dos ediciones que acaban de llegar a las librerías.
Pero no hablemos de los libros. Dejemos que se salven solos.
En megustaleer.com podemos leer un fragmento de La Dalia Negra (reeditado por Literatura Random House), del gran James Ellroy –aunque no tan grande como él cree, recordemos que soltó al New York Times: “Soy el más grande novelista de género negro que ha existido nunca”– que arranca con este párrafo:
No la conocí en vida. Existe para mí a través de los otros, mediante la evidencia de lo que su muerte les obligó a hacer. Trabajando en retrospectiva, buscando solo hechos, la reconstruí bajo la forma de una muchachita triste y una puta, en el mejor de los casos como alguien que-pudo-ser… una etiqueta que también podría aplicárseme a mí. Ojalá hubiese podido concederle un final anónimo, relegarla a unas pocas palabras lacónicas en el informe de un policía de Homicidios, la copia en papel carbón que se manda a la oficina del forense, junto con el papeleo necesario para llevarla al cementerio. Lo único que había de malo en mi idea es que ella no hubiera querido que las cosas ocurrieran de ese modo. Por brutales que fueran los hechos, ella hubiese querido que llegaran a ser conocidos. Y puesto que le debo mucho, y soy el único que conoce toda la historia, he empezado a escribir esto.
En planetadelibros.com han colgado cuatro historias de Todo por amor y otros relatos criminales (Destino), de Lorenzo Silva. La primera comienza así:
Si yo fuera juez
La desgana con que Samuel había estado mirando la tele, desde que se sentara frente a ella con la bandeja de la cena, se trocó en vivo interés cuando la locutora pasó a dar cuenta de aquella noticia. Era, desde luego, una de esas que llaman la atención de cualquiera, del tipo hombre muerde a perro:
—El juez decano de Barcelona, acusado de un delito de violencia doméstica por presuntos malos tratos a su mujer.
Rescatar dos libros, nada más, cuando se publican miles, de poco sirve. Por eso abro esta entrada a más propuestas. ¿Qué libro salvarías de la hoguera este Black Friday? Podéis elegir, por acotar el rescate, libros negros, policiacos y criminales. O desgenerados. Lo que queráis. Voy a embeber aquí los mejores tuits, quizá hasta emborracharme.
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Actualización del 27 de noviembre: Grandes libros, y grandes tuits salvadores:
@leandropem «Cien años de soledad», por pasar, al menos, cien años sin oir hablar del black friday. Socorro
— Iñaqui Gómez (@jigr379) 24 de noviembre de 2016
@leandropem ‘Patria’, es muy negro, criminal y lleva el olor a humo ya dentro https://t.co/KZmwmbpY7x
— Txema Valenzuela (@txemavalenzuela) 26 de noviembre de 2016
@leandropem ‘1.280 almas’, de Jim Thompson. Ha sobrevivido a varias muertes, así que no puede arder.
— Claudio Cerdán (@claudiocerdan) 24 de noviembre de 2016
@leandropem ‘Falcó’, aunque él ya es un especialista en salvarse de las quemas.
— Rogorn Moradan (@Rogorn) 24 de noviembre de 2016
@leandropem ‘Luna caliente’, de Mempo Giardinelli. No entiendo cómo no es más conocido (y venerado).
— Lorenzo Silva (@VilaSilva) 25 de noviembre de 2016
@leandropem @zendalibros «El tango de la Guardia vieja» el mejor analgésico emocional que conozco y «El conde de Montecristo» de Dumas
— Ada M. (@adacaramelada) 24 de noviembre de 2016
@leandropem Salvaría Indómito y Lo que nos queda de la muerte. #NovelaNegra pura y dura.
— SomNegra (@SomNegra) 24 de noviembre de 2016
@leandropem cualquiera de Henning Mankell y su personaje: Kurt Wallander.
— Jesús Ballesteros (@ballesteros79) 24 de noviembre de 2016
@leandropem Salvaría al siniestro y encantador Tom Ripley y las cinco novelas que escribió sobre sus aventuras Patricia Highsmith.
— Alberto Marroquín (@al_marroquin) 24 de noviembre de 2016
@leandropem ‘Las Hermanas Coloradas’ (1969), de García Pavón. Más que nada porque si no la devora el fuego, la enterrará el olvido.
— Juan Carlos Laviana (@j_c_laviana) 24 de noviembre de 2016
@leandropem veo lo de @j_c_laviana y subo la apuesta: «Plinio: casos célebres» (@EdDestino). De F. G. Pavón, claro.
— Miguel Barrero (@MiguelBarrero) 24 de noviembre de 2016
@jmOrbera @leandropem El diaro de Ana Frank
— Susana Rizo (@Sianeta) 24 de noviembre de 2016
@leandropem La llave de cristal de Dashiell Hammett. Para no olvidar nunca lo corrupta que era antiguamente la clase política. Oh… wait! 😂
— Leersinprisa (@Atram_sinprisa) 25 de noviembre de 2016
@leandropem ‘Cuchillo de palo’ de @cpgellida, un novelón profundo, con poso y muy bien escrito. ¡Lo recomiendo!
— Benito Olmo (@BenitoOlmo) 24 de noviembre de 2016
@leandropem De qué hablamos cuando hablamos de amor, Raymond Carver.
— Miguel Santamarina (@mgsantamarina) 24 de noviembre de 2016
@leandropem El humor y la novela policiaca suelen estar reñidos. «Qui pro quo» de Gesualdo Bufalino es una maravillosa excepción.
— Óscar Esquivias (@OscarEsquiviasG) 24 de noviembre de 2016
@leandropem @BenitoOlmo salvaría cualquiera que empezara en un final feliz y terminara sin resolver.
— César Pérez Gellida (@cpgellida) 24 de noviembre de 2016
@leandropem «Lo que el hielo atrapa» de @BrunoNievas: Notas el frío, el hambre y la desesperación.
— R. López-Herrero (@ElExpecial) 24 de noviembre de 2016
@leandropem ‘Normal’, de @ElExpecial. Por salirse de todos los tópicos negros y presentar a un asesino que podría ser cualquiera. Es genial.
— Blas Ruiz Grau (@BlasRGEscritor) 24 de noviembre de 2016
@leandropem Cosecha Roja de Hammett. Ese detective observador… pero que también patea las calles y se ensucia de barro y sangre.
— John V. Smilax (@bienvenarrativa) 24 de noviembre de 2016
@leandropem «El asesino dentro de mí» de Jim Thompson y «El factor humano» de Graham Green, por recuperar dos lecturas negras y juveniles.
— Miguel Munárriz (@miguel_munarriz) 24 de noviembre de 2016
@leandropem salvaría «La historia interminable», de Michael Ende. Es el libro perfecto: no acaba jamás 😉
— Ana Glez Duque (@DoctoraJomeini) 24 de noviembre de 2016
@leandropem Hay que quemar todo lo que huela a noir: debería de estar prohibido y ser literatura clandestina 😎
— Nieves Abarca (@MNievesAbarca) 24 de noviembre de 2016
@leandropem «La piel del tambor», porque me salvó cuando lo necesitaba.
— No queda sino leer (@noquedasinoleer) 24 de noviembre de 2016
@leandropem Cualquiera de la serie de Pepe Carvalho, que tan grandes momentos nos ha dado quemando su biblioteca en la chimenea.
— Alex García (@alejogarciamont) 24 de noviembre de 2016
El señor de los anillos. Para empezar. https://t.co/QsQxFPuFaO
— Juan Gómez-Jurado (@JuanGomezJurado) 24 de noviembre de 2016
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