El pasado miércoles, en el club Matador de Madrid, los sevillanos María José Solano y Miki Leal presentaron su libro Jerez, editado por Tintablanca. Tras la introducción de Carolina Pérez, su directora, dio comienzo el acto. Eran las siete y media en punto y con la sala abarrotada y la emoción contenida, María José Solano, escritora y columnista de ABC —entre otras muchas cosas—, comenzó rindiendo un precioso homenaje al gran Antonio Burgos, porque “con la noticia de su fallecimiento hoy parecía que el tráfico se había detenido como se habían detenido las campanas, y la ciudad estaba de luto”.
Este libro es una carta de amor que le dedican después de haberla visitado, vivido y leído. Leal no quiso hacer ilustraciones al uso, sino representar un Jerez más personal desde su mirada libre, acompañando a los textos de Solano. De una manera quizá más onírica, iba construyendo ilustraciones a partir de los pequeños detalles de los que le hablaba la escritora: una bandera, una onda, un azulejo. Eso es Jerez.
Carolina pregunta que cómo han abordado el libro, tanto a la hora de escribir como de pintar, las dificultades que se han encontrado, sus métodos, sus preferencias. Leal cuenta que le interesa la perfección conceptual, no la visual. Y Solano lo explica con conocimiento: el pintor busca las sensaciones, la reverberación de la obra en quien la contempla, y eso cesa en cuanto la obra resulta técnicamente mejor de lo que debiera y se parece demasiado a la realidad. En ese momento se anula la creatividad del propio espectador, lo cual va contra todo lo que él busca, porque siendo además sevillano y barroco, desaparece la seducción. Tiene incluso una teoría que comparte, su teoría de “los brazos cruzados”, según la cual el mundo se construye según lo ves, es decir, que para pintar un paisaje, primero se pinta el cielo en todo el lienzo, encima la casa y encima el resto, porque busca trasladar la impresión de lo físico. Cuando pinta un retrato es igual: pinta el fondo, luego el cuerpo y luego el brazo encima, que tiene que estar montado. Es como el aire de Las hilanderas de Velázquez, o un dibujo de Ingres, que tiene que proyectar algo. La escritora conoce muy bien ese aire amarillo tan velazqueño, y solo hay que sentarse y mirar y escuchar. Eso es Jerez.
Solano habla de los pilares culturales de Jerez, el vino, el flamenco, el caballo, que en lo literario y en lo pictórico son fundamentales. Los jerezanos argumentan que Jerez es mucho más que esa triada capitolina, y es cierto porque esos iconos no son superficiales, sino que tienen una profundidad inmensa. Los estratos de conocimiento, tradición e historia del folclore de esos tres elementos te llevan a ver que el icono es mucho más que, por ejemplo, un anuncio de vino. El vino de Jerez, único en el mundo, ese milagro alquímico y misterioso que nos sorprende cada año. Para Leal son los vinos más especiales del mundo. Los matices, el viento, el mar o la luz entrando en la bodega nos dan el vino más sofisticado del mundo. Eso es Jerez.
La guía es un recorrido geográfico, emocional y sensorial. Desde el cielo se ve como una ciudad que se rompe en plazas irregulares, con reminiscencias árabes. Y hay un lugar muy especial que no deben perderse: la plaza de la Yerba, un lugar pequeño, casi escondido, que los autores se encontraron de repente, sin esperarlo, detrás de un quiebro en una calle. Ahí uno se puede sentar en verano bajo la sombra agradecida y en invierno buscando el calor de una copa de fino. Es una plaza con una vida vieja, que nos habla y nos cuenta historias de muerte y de vida en la Edad Media, del día a día del mercado siglos más adelante, de las sombrererías y tiendas de telas en la Ilustración… Ahora alberga una de las tiendas más bonitas de Jerez, que ojalá no esté condenada a muerte, porque es una tienda de imágenes de santos. Tomar algo en esa plaza nos da la clave del aire que pinta Leal en sus cuadros, de las sensaciones de las que tratan en esta carta de amor. Esa plaza es Jerez.
Arrancan los aplausos del público, al que imagino estas Navidades abarrotando los bancos de la plaza de la Yerba y brindando por el nuevo año con un buen fino, palo cortado o amontillado, al son de un buen flamenco. Después irán a comer al bar del Chule, acompañados por la huella silenciosa de todos los que amaron Jerez.
-
Lo gótico como revolución
Para Greenaway, siguiendo las tesis de Marx, Benjamin o Althusser, hay una violencia sistémica que aprisiona al sujeto y lo configura como siervo de sus dinámicas. El capitalismo, sin ambages, debe ser definido como violencia sistemática ya que cercena a los individuos su libertad y su potencialidad. Desde esta perspectiva, la lógica capitalista debe ser considerada como un mecanismo de terror que se manifiesta tanto en los cuerpos de los sujetos como en sus psiques. El capitalismo es body horror pero también psychological horror ya que se adueña y tortura nuestra carne pero también gestiona, deforma y aniquila nuestra psique….
-
Las 7 mejores películas románticas para ver en Prime Video
1. El graduado (The Graduate, Mike Nichols, 1967) 2. La ciudad de las estrellas. La La Land (La La Land, Damien Chazelle, 2016) 3. Her (Spike Jonze, 2013) 4. Antes del anochecer (Before Midnight, Richard Linklater, 2013) 5. Retrato de una mujer en llamas (Portrait de la jeune fille en feu, Céline Sciamma, 2019) 6. Jerry Maguire (Cameron Crowe, 1996) 7. Expiación. Más allá de la pasión (Atonement, Joe Wright, 2007)
-
Tratado sobre la intolerancia, de Richard Malka
Este libro es, en realidad, un alegato pronunciado por Richard Malka el 17 de octubre de 2022 en nombre de Charlie Hebdo ante el Tribunal Especial en lo Penal de París, en apelación del juicio por los atentados de enero de 2015. En Zenda reproducimos el arranque de Tratado sobre la intolerancia (Libros del Zorzal), de Richard Malka. *** Qué sentido tiene repetirme al infinito cuando durante quince años he dicho todo lo que tenía para decir, desde todos los ángulos posibles, sobre la libertad de expresión, la necesidad de la blasfemia, la historia de Charlie Hebdo y de las…
-
Zenda recomienda: La ciudad y los perros, de Mario Vargas Llosa
La propia editorial apunta, acerca del libro: «En 1962, La ciudad y los perros recibía el Premio Biblioteca Breve y unos meses más tarde era publicada tras sortear la censura franquista. Así comenzaba la andadura literaria de esta obra con la que Mario Vargas Llosa alcanzó el reconocimiento internacional y que hoy considerada una de las mejores novelas en español del siglo XX. Traducida a treinta idiomas, está ambientada en el Colegio Militar Leoncio Prado. Los protagonistas, un grupo de jóvenes que se «educan» en una disciplina militar implacable y violenta, aprenden a sobrevivir en un ambiente en el que están muy…
Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: