El escritor navarro Fermín Goñi ha escrito una novela plagada de enigmas en la que, tras la muerte de su padre en extrañas circunstancias, una economista española abandona Londres para instalarse en una urbanización madrileña. La sucesión de hechos inusuales que se producirá a continuación le llevará a reafirmarse en la idea de que su padre no murió por causas naturales.
En este making of Fermín Goñi narra el origen de Un crimen en línea recta (Fondo de Cultura Económica).
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La idea de escribir Un crimen en línea recta nació en Edimburgo, hace algo más de diez años. Por aquel entonces vivía en la capital de Escocia y casi todos los días pasaba por el edificio principal del Royal Bank of Scotland y me detenía un rato para ver entrar y salir a las personas que, a la misma hora que yo, salían para almorzar un sándwich en un establecimiento de Marks & Spencer, en Princess Street, donde, además de comida empaquetada, había muchos zumos de frutas hechos al momento. Como yo iba de lunes a viernes a ese establecimiento a la misma hora que los bancarios, coincidía con gentes con las que al cabo de las semanas me saludaba, pero sin cruzar una palabra. Un día me encontré con una mujer de unos cuarenta años que hablaba por teléfono en español mientras trataba de hincarle el diente a un sándwich de no se qué. La escena fue algo cómica, porque entre sujetar el teléfono con una mano y sostener la comida y la bebida con la otra, el zumo de manzana se le fue al suelo y la ayudé para recomponer su almuerzo con bastante poca habilidad, porque se me cayó mi botellín de jugo de naranja y los dos nos quedamos sin bebida.
De ese encuentro surgió la idea de una novela en la que la protagonista fuese una bancaria, pero que la acción transcurriese en Madrid. Escribí finalmente una novela de intriga, de enigma, viendo la cara de la bancaria que conocí en Marks & Spencer, pero llevando la acción primero a Londres, luego a Majadahonda, después a Edimburgo y finalmente de nuevo a Madrid. La trama comienza con la muerte repentina del padre de la protagonista, que era escocés de Edimburgo, arquitecto y radicado en Madrid. Una muerte extraña que la protagonista no acepta (cree que lo han asesinado con veneno) porque piensa que no es un deceso natural. El arquitecto, Ian MacDonald, había construido en Majadahonda la urbanización más original que había en toda la provincia porque ocupaba una manzana pero solo eran 18 chalés, una piscina y… una zona para perros y animales de compañía de casi 1.500 metros cuadrados. Para algunos, una excentricidad. Para los vecinos de la urbanización (que se llama The Four Seasons, pero en lenguaje común se conocía como La For), un lugar idílico.
La muerte súbita de su arquitecto hace que la protagonista, su hija Marta, que es bancaria y vive en Londres, tome dos decisiones simultáneas: regresar a Madrid y separarse de quien había sido su marido durante quince años, un directivo de banco, australiano, que siempre estaba de viaje. La hija de ambos se queda con la madre, pero le pide que en la nueva vida que van a comenzar en Majadahonda le permita tener un perro, pero no uno cualquiera sino un Alaskan Malamute, que se va a convertir en protagonista involuntario de una novela. Marta, a medida que pasan los días, va descubriendo que La For es una urbanización donde han pasado muchas cosas raras, varios vecinos han vendido sus casas, una persona desapareció sin dejar rastro y todo es extraño.
En dos meses la vida de Marta da un giro radical porque se entera de que hereda una fortuna, pero no le cuadra la vida de su padre ni lo que ha estado ocurriendo en La For. La irrupción de un antiguo jefe de la Brigada de Homicidios de la policía madrileña, que por causa de un ictus se desplaza en silla de ruedas y ha perdido casi por completo el habla (aunque su cerebro funciona a velocidad de vértigo), comienza a ser el principio de una aventura vital en la que la protagonista cree que va a conocer por qué murió su padre y qué ha pasado últimamente en la urbanización. Una serie de incidentes hará que tenga que intervenir la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil para tratar de esclarecer lo que está sucediendo en el entorno de Marta. Mientras, el policía en silla de ruedas únicamente deja caer que todos los hechos extraños radican en una sola cosa: una línea recta. La historia de Una línea recta es una novela de 264 páginas en la que está todo, como corresponde a un libro de intriga y enigma con ribetes negros.
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Autor: Fermín Goñi. Título: Un crimen en línea recta. Editorial: Fondo de Cultura Económica. Venta: Todos tus libros.
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