Álbum Línea de fuego
Mochila de mi abuelo. Sirvió en el bando nacional en Zapadores, cuerpo al que accedió al mentir en la oficina de reclutamiento. Cuando vio que todos los agricultores iban a infantería, dijo que era ayudante de mecánico. No se había acercado a un motor en su vida. Durante la mayor parte de su participación en la guerra, estuvo bajo el mando de un sargento italiano de la División Flechas Verdes. Cuando me habló de él, fue la única vez en mi vida que escuché a mi abuelo usar la expresión «hijo de la gran puta». A mi abuelo, Francisco Fernández Franco, le conocían sus compañeros como Franco, a secas, debido a que, al pasar lista, decían tu nombre y tu primer apellido y tenías que contestar con el segundo. Se harán ustedes una idea de las bromas. Cuando de muy niño le pregunté, por pura curiosidad morbosa, que cómo fue la primera vez que vio un muerto, me dijo que fue un soldado republicano al que le detonó la bomba que estaba poniendo en uno de los puentes que construían. Dijo que había soldados republicanos en un radio de 20 metros. También me dijo que nunca pasó más miedo en su vida que cuando lo vio. Con la guerra casi finalizada, le tocó responsabilizarse de la entrega de un perro adiestrado para localizar explosivos. Cuando pasó por un puesto para recoger la comida, para el perro le dieron una lata de carne y para él un mendrugo de pan con el que se podía clavar un clavo. Te dejaban claro quién era el más prescindible. Dejo a su imaginación que deduzcan quién se comió la carne y quién el pan. @Ozymandias79
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